Over Again I y II. [TERMINADA]

6. Parte II

Camila's POV

—Camila, ¿Qué te dijo?—La Dani me hizo entrar rápido a su casa y me sentó en el sillón.

No dije nada y solo me largué a llorar, sentía que me moriría en ese momento. Por mi mente pasaban antas cosas; nuestros hijos, nuestro matrimonio, el futuro que habíamos imaginado y detrás de eso, afloraba esa pena negra de darme cuenta que había caído por segunda vez, que el muy asqueroso fue capaz de hacerlo de nuevo delante de mis narices.

—Tranquila amiga, llora todo lo que tengas que llorar—Me entregó su hombro mientras me abrazaba—no iba a dejar que fueras hasta allá, por eso te convencí de que lo esperaras en la casa mejor.

—¿Qué voy a hacer ahora?—Limpié mis lágrimas—no sé si pueda superarlo esta vez.

—Lo harás, y yo estaré ahí contigo—Me abrazó más fuerte—vamos por los niños que ya te deben echar de menos.

Ella manejó hasta la casa de la señora Gladys, allí esperaban los tres.

—¡Mami!—Los mayores se lanzaron a mis brazos.

—Los extrañé tanto pero la mamá tenía cosas que hacer—Los besé—vayan por sus mochilas que nos vamos.

—¿A nuestra casa?—Preguntó Laura.

—No mi amor, ahora nos iremos a otra casa pero te prometo que allá están todos tus juguetes.

—Vengan niños, yo los subiré al auto—La Dani fue por sus mochilas y salió con ellos de la mano.

—Gracias por todo señora Gladys—Tomé al bebé en brazos.

—No hay porqué, ¿usted está bien?—Sonreí un poco y asentí—¿no necesitará que vea a los niños?.

—No estaremos aquí, partimos ahora a Turín pero no se preocupe que esto es suyo—Le extendí un cheque que tomé de mi bolsillo—no sabe cuánto le agradezco por todo.

—Lo único que le digo es que pase lo que pase, usted es una excelente mujer y una mejor madre—Me abrazó—a donde quiera que vaya, cuídese mucho ¿bueno?.

—Claro que sí, la extrañaremos mucho—La volví a abrazar al borde de las lágrimas—cuídese también usted, espero que nos veamos algún día.

Subí al auto rumbo a Turín, la Dani me ayudó con todo y a llevarme las cosas de los niños y las mías. Consiguió un camión de mudanzas en tiempo récord y ahora todo estaba listo para vivir en mi antiguo departamento, hace años no lo veo pero confío en la Dani y sus conocimientos de decoraciones de hogar.

—Bueno, ya—Estacionó—¿quién quiere ver su nueva casa?—Habló.

—¡Yo!—La pequeña se fue con ella.

—Mami, ¿donde está el papá?—Preguntó Álex tirándome de la polera.

—Trabajando mi amor, pronto lo verás de nuevo.

—¿Por qué no viene con nosotros?.

—¿Te acuerdas cuando querías que nos fuéramos de vacaciones?—Asintió—bueno, ahora piensa que estamos en unas. Esta es una ciudad nueva que tenemos que conocer, hay muchos parques por aquí, ¿quieres que un día nos vamos de aventura por esta ciudad?.

—¡Sí, sí!—Dio unos saltitos.

—Bueno, ahora podremos. Anda, vamos a subir el ascensor.

Subimos y los niños quedaron encantados con sus nuevas habitaciones porque cuidamos que no quedaran tan distintas a las que tenían para que no fuera tan traumante para ellos. El bebé dormía así que lo acosté en su cuna al igual que a sus hermanos y me fui a la cocina.