Sex Game [Emiliaco]

5. Día 1

"Día 1"

~☆~

Giré mi rostro ignorando la mirada del hombre de rizos que estaba frente a mi a una distancia prudente.

- Déjenme presentarlos – habló Katherine colocándose al lado de ellos – Chicos, él es Dylan – el chico moreno nos sonrió a todos – Y el que está a mi otro lado es Emilio.

- Es un gusto conocerlos a todos – habló él.

- También es un gusto conocerlos, chicos – respondió Mariana – Mi nombre es Mariana, el de mi derecha es Nikolas y el de mi izquierda es Joaquín.

- Mucho gusto – habló Niko.

- Lo mismo digo – hablé mirando hacia el suelo. Sentía la mirada del chico puesta aún en mí.

¿Por qué mierda me miraba tanto?

Después de la presentación el chico que si no mal recordaba se llamaba Dylan colocó música, sirvieron unas bebidas y comenzamos a convivir entre todos.

Descubrí que Katherine era modelo. Regina era periodista y Sergio era un nadador profesional.

¿Cómo es que todos terminaron aquí?

- Pues yo soy dueño de unas compañías de autos – le doy un sorbo a mi bebida.

- ¿De cuál eres dueño? – me pregunta Sergio.

- ¿Ubicas la marca BMW? ¿Daimler? ¿Honda?

- No me jodas ¿eres el dueño de la marca Honda? – asiento lentamente – Chico, esos autos son jodidamente calientes, me moriría por tener uno en mi cama – sonrío divertido.

- Pues sigue soñando, son mis mejores bebés y cuestan un ojo de la cara.

- Me lo imagino.

- Ugh, dejen de hablar de autos, es aburrido – se queja Katherine - ¡Emilio, súbele a la bocina! – ahueca con sus manos su boca y le grita.

A los segundos la música gobierna el momento. Niko y yo encerramos a Mariana y los tres bailamos juntos.

Podemos sentir la mirada de todos, absolutamente todos en nosotros.

- ¡Ustedes sí que saben divertirse! – nos grita el chico moreno, creo que se llamaba Dylan.

No era muy bueno recordando.

Katherine se acerca a nosotros, jala mi cuerpo al suyo y sujeto su cintura mientras nos molemos con nuestras caderas juntas.

El alcohol comienza a hacer acto de presencia en mi cuerpo y no soy consciente de lo que hago y no me importa.

Tomo trago tras trago que me dan sin parar.

- Joaco, creo que te estás pasando – me susurra Niko y me toma del brazo sacándome de ahí – Cuando Mariana dijo que hicieras lo que quisieras no se refería a ponerte pedo el primer día.

Suelto una pequeña risita – Eres tan divertido – Niko niega y me lleva al baño.

Me hinco y cuando él abre la taza del inodoro no lo pienso y saco toda la mierda que bebí.

- Eso es – soba mi espalda – Sácalo, sácalo todo chico sin aguante – se burla.

Corto un poco del papel de baño y me limpio la boca. Me levanto y me dirijo al lavamanos para lavarme el rostro. Cepillo mis dientes y cuando por fin puedo pensar con claridad salgo al lado de Niko, pero esta vez sin tomar alguna gota de alcohol. Mi cuerpo ya tenía suficiente por este momento.