La gemela de Lily Evans.

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En el capítulo anterior:

- ¿No crees que se molestará más si se juntas con dos Slytherin más, Cissy?

- Estoy de acuerdo - Narcisa me sonrió - ¿qué dices, Tn Evans?

- Digo que... - lo pensé durante unos instantes - ... digo que será divertido molestar a Balck mayor un poco más - sonreí maliciosa. Uy, Sirius, vas a ver lo que es meterse con una Evans.

Ahora:

¿Recuerdan que dije que fue una bomba la amistad de Regulus Black y Severus Snape conmigo y Lily? Bien, pues no fue nada comparado con el entrar en el Gran Comedor a la hora de comer. Todos posaron su vista en la risa de las hermanas Black, que sorprendentemente no estaban fingiendo y, de verdad, les había hecho gracia mi chiste malo.

En la mesa de Slytherin todos se hallaban sorprendidos a más no poder. Regulus parecía que acababa de llevarse algo a la boca y el tenedor se había quedado flotando delante de sus labios abiertos de par en par al igual que sus ojos.

En la mesa de Gryffindor, lo Merodeadores estaban igual de sorprendidos, al igual que Lilý y mis demás amigas. Sirius, en cambio, parecía a punto de desmayarse y más que a Narcisa y a mí, veía a Bella riendo sin parar.

  Me despedí de Cissy y Bella y fui hacia la mesa de Gryffindor.

  Me senté junto a mi hermana, quien seguía todos mis movimientos con la mirada, aún sorprendida.

- Estoy empezando a incomodarme - hablé sirviéndome algo de comida.

- ¿Cómo Bellatrix no te ha matado? - preguntó James.

- Pregunta más importante. ¿Cómo hiciste para que esa amargada riera? - Sirius seguía con los ojos abiertos de par en par. Por ahora, y desgraciadamente, no parecía muy molesto. Simplemento sorprendido.

- Escondiéndome de unos psicópatas.

- Pero... pero... ella... la locaaa, rió. La loca rió - Sirius se llevo las manos a la cara, cada una a un lado de sus ojos acariciando su frente - ¿pero es que nadie más a parte de mí se da cuenta de lo estúpida y ridícula que eres?

- Eres muy gracioso, ¿sabes? - le dije con una sonrisa sarcástica.

- ¿No hay nadie más, a parte de Sirius, al que le caigas mal o qué? - James parecía entre divertido e incrédulo.

  Estaba incómoda. Mucho. Al principio había sido divertido, ya no tanto.

- ¿Podemos cambiar de tema? - Lily también parecía incómoda. Gracias, hermana hermosa.

  Obviamente James fue el primero en seguir su petición y nuestras amigas y Remus, al ver nuestra incomodez, también.