40.- Siguiendo una Pista 1ra parte

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Leila

Descansaba, hubiera querido acompañar a Mario, para conocer más de esos niños, pero aunque ya no éramos prisioneros todavía estábamos bajo custodia. Hasta que se negociará nuestras vidas con nuestro capitán.

Según comprendía, habíamos desembarcado en la frontera norte de una especie reino llamado Layer, la frontera con otro reino llamado Lufenia. Un reino con el que iban en guerra generaciones, una guerra que no acababa, solo estábamos en un período de calma en el conflicto.

No comprendía como una guerra podía durar tanto, ¿Por qué no usaban toda su fuerza para ganar o perder en una guerra definitiva? ¿Por qué no llegaban a un acuerdo de paz definitivo si por tanto tiempo casi no habían enfrentamientos? Estaba todo más allá del límite de mi comprensión.

Mientras pensaba en eso, los demás hablaban de como contarían esto para que no sonara decepcionante. Uno de los soldados que era compañero de Mario se acercó a nosotros

—Orau jruk Leila Nilli yus'u golglu —habló yo no lo comprendía.

—Necesito que Leila Nilli venga conmigo —tradujo otro.

—¿Por qué?

—Jessy, Jerry —habló el primero—. Peligro —añadió.

—¿Por qué la quieren a ella? —preguntó Masiel sin comprender, pero a mi no me costó comprenderlo. Si Jerry y Jessy tenían la Magia de la Nada y la habilidad para utilizarla como arma, no cualquiera podía ser una amenaza para ellos.

—Es por esto —respondí liberando una flama pequeña en mi dedo por unos instantes—. Son los niños que me presentó Mario, debe creer que es otro mago el que los capturó.

—¿Estás loca? ¡Esta no es nuestra guerra! —me gritó.

—Deja que vaya, a lo mejor eso nos garantiza los suministros que necesitamos para poder volver a casa —le respondió Linci.

—No es nuestra guerra, y no está pidiendo que peleamos una guerra por ellos, me está pidiendo un simple favor. Si no vuelvo, cuéntenle lo que hice a madre —respondí finalmente.

Me levante para caminar con ellos, y sabiendo que intentaría detenerme apunte mis manos hacia atrás en señal de advertencia. No estaba jugando.

Aunque realmente deseaba, que Mario solo estuviera sobreestimando la habilidad de nuestro oponente, pues si el no podía ¿cómo podría yo? 

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