Danganronpa: Los pilares de la Esperanza

11.Mi amigo esta muerto... me parto la caja ¿5?

Corría lo más rápido que podía, ¿porque demonios a vuelto a pasar?, y ¿porque a ella?, ¿porque a Luna?, Luna Suyou, la Estudiante Futbolista Definitiva estaba muerta y yo no había llegado a tiempo para salvarla, seguí corriendo lo más rápido que mis piernas daban, cuando entré al hotel de la desesperación choqué fuertemente con alguien y ambos caímos.

—A serás idiota—dijo un Kenji en el suelo, Kibou estaba con el.
—Cadaver—dije mientras me paraba lo más rápido que podía.
—¿Donde?—pregunto cambiando su expresión Kenji.
—En la piscina—respondí.
—Sayoshi avisa a los demás—el chico asintió—Naegi-san ven conmigo—dicho esto yo y Kenji salimos disparados hacia el segundo piso.

Corrimos hasta llegar a los vestuarios, al llegar al frente de las puertas de los vestuarios me detuve, no quería ver esa escena otra vez, la escena de una compañera partida por la mitad.

—¿Que crees qué haces?—Kenji me tomo de la mano y me condujo al vestuario de chicos—no es momento para quedarse parada—él tenía razón, pero lo que había visto ahí, no era algo normal.

Entramos a la piscina y nos acercamos al cadaver, a cualquier le hubieran dado ganas de vomitar, el cuerpo de Luna había sido cortado en dos partes desde el estómago, sus órganos se encontraban despedazados en el suelo, su sangre había dejado un gran charco rodeando su cadaver y empezaba a esparcirse por la piscina, sus ojos parecían completamente vacíos, no había ni un rastro de vida en ellos, se podía ver como la sangre salía de su boca, su cara mostraba terror, efectivamente ella había visto al asesino, pero había reaccionado muy tarde y eso le había costado la vida.

—Joder—dijo Kenji—ya entiendo porque no querías entrar—Kenji suspiro un poco—¿sabes que por culpa de la situación tú eres la mayor sospechosa?—tenía razón iba ser la principal sospechosa.
—Entonces voy a ser yo misma la que demuestre mi inocencia—yo se que no soy la culpable y Luna también lo sabe.
—Pareces determinada—Kenji sonrió.

Din... Don...

ATENCION, UN CADAVER A SIDO ENCONTRADO, EN UN MOMENTO EMPEZARÁ EL TIEMPO DE INVESTIGACIÓN.

Al rato escuche pasos que se acercaban, mire en dirección a los vestuarios, los demás habían llegado.

—Ya traje a los de...—Kibou grito tan fuerte que parecía que se quedaría sin cuerdas bocales.
—Ay dios...—Hotaka se desmayó. Las reacciones de mis compañeros eran de puro horror, pero la de ella era diferente, no solo mostraba horror si no tristeza y desesperación.
—¿Porque?—Chinami cayó de rodillas frente al cuerpo de Luna—prima... ¿porque?—las lágrimas de Chinami corrían por sus mejillas—no es justo—Umiko se le acercó para consolarla, pero Chinami no paraba de llorar.

Prima, ¿Luna y Chinami eran primas?, mire atentamente el cadaver de Luna y a Chinami, sus tonos de piel morena eran iguales, ambas tenían un cuerpo bien formado, sus ojos rosados eran muy parecidos, por no decir iguales, la única diferencia que les encontraba era en el pelo, Chinami tenía el pelo negro y Luna lo tenía café, perfectamente podrían haber sido hermanas.

—Vaya, vaya—esa chillona voz se volvió a escuchar—creo que yo no soy así de cruel—dijo Monokuma.
—Tienes razón—Monokuma me miro, ahora su ojo era de color ámbar—tú eres mucho peor.
—Me alagas—dijo el oso, sinceramente cada día te odio más—aquí les dejo la ficha Monokuma, la cuanta regresiva empezará ahora—hubo un pequeño silencio, pero fue interrumpido por Umiko.
—Eto... chicos—dijo refiriéndose a mi y a Kenji—ósea... no se... yo creo que deberían dejarlo mejor para otro momento—Umiko señaló nuestras manos que se mantenían unidas, yo solo saqué mi mano con tranquilidad y mire a mis compañeros.
—Maldita sea Togami—Monokuma miró al chico de corbata blanca—jamás había visto tan mandada a la jodida frienzone—Kenji se puso rojo, no sabía si por la vergüenza o por la ira.
—No podemos distraernos más—dije que con algo de rubor en mis mejillas—haremos lo mismo que la otra vez, dos personas vigilarán la escena del crimen e iremos por parejas—mire a Chinami que se encontraba mirando el cuerpo sin vida de su prima—Umiko-chan quédate con Chinami-chan a vigilar—la chica asintió.
—Oye, pero ahora somos impar—señaló una chica, Majime Noshimu, la Estudiante Mercadera Definitiva, sin duda era un extraño talento, cuando le pregunté que era lo que vendía me pregunto que era lo que nesesitaba.
—Entonces habrá un trío—espero no tener que volver a hacer esto.
—Me quedaré con Shaidon aquí—dijo Ryu señalando al chico desmayado—cuando despierte investigaremos—asentí. La gente empezó a formar sus parejas y a irse de el gimnasio, yo termine siendo parte del trío, así que me fui con Kenji y Hisashi Mitarai, era el chico de ojos ámbar apagados y pelo rubio opaco, era el Estudiante Dibujante Definitivo.