Danganronpa: Los pilares de la Esperanza

24.Si mis ojos no vieran no lo sintiria ¿12?

—Oye...—comencé a abrir los ojos lentamente, traté de enfocar la mirada, ¿Kyoko?—ey...—no su voz es distinta—vamos... —visualize mejor—levántate—Akira estaba al frente mío.

—¿Que fue lo qué pasó?—pregunté mientras me recomponía.
—No lo se muy bien—dijo ayudándome a pararme—lo último que recuerdo es estar en la enfermería y después desmayarnos por el gas.
—Creo que ya me acuerdo—mire a alrededor, todo estaba rodeado de basura—¿donde estamos?
—Si tuviera que adivinar estamos en una especie de basurero—se volteó a mirarme—¿crees que sigamos en la academia?—mire a los alrededores y recogí un cuaderno con el logo de Kibougamine.
—Creo que si, pero no se en que parte exactamente—abrí el cuaderno, tenia un nombre y algo de información.

Makoto Naegi
Asignatura: Matemáticas

—Ten—le lance el cuaderno—creo que le pertenece a tu padre.
—Definitivamente seguimos en al academia—comenzó a mirar las páginas—dios, era bastante malo—cerró el libro—en fin, mientras estabas inconsciente exploré un poco lugar, la única salida aparente es esa puerta, pero no eh podido abrirla y no encuentro ninguna llave, así qué tal vez debamos buscar algo para forzarla.
—Creo que es lo mejor por ahora, avísame si encuentras algo—camine en una dirección aleatoria, el lugar era grande, pero era difícil perderse, era circular y la puerta era bastante fácil de encontrar desde cualquier punto de la sala.

Busque por todos lados, encontré varios cuadernos como los que le había entregado a Akira, solo que con otros nombre, Mondo Owoada, Sakura Ogami, Chihiro Fujisaki, entre otros.

Mientras buscaba encontré otro de los cuadernos, Kirigiri Kyoko, leí el nombre dos veces, porque se me hace tan familiar, digo es la esposa del director de Kibougamine, pero se siente triste, pensar en ese nombre, un fuerte dolor de cabeza me vino de golpe, deje caer el cuaderno y me arrollide y retorcí de dolor, de a poco comenzó a pasar, ¿que a sido esto?, me recompuse de a poco.

¿Por qué el nombre de la madre de Kyoko Kirigiri me pone tan nostálgica?, tendrá alguna relación con los sueños que eh estado teniendo de esa chica de ojos morados, pero... ¿como se relacionan?, a penas soy capaz de recordar mis sueños, Kirigiri Kyoko... qué haces en mi cabeza.

—Orik—escuche a Akira desde el otro lado de la sala—creo que encontré algo.

Me quede pensando un segundo, no confiaba en Akira, no se si las cosas que pasan al rededor de ella serán por orden de ella, pero algo oscuro la rodea, siempre tiene demasiada suerte, se que es muy sospechoso de todo lo que nos a pasado, pero por alguna razón soy incapaz de pensar mal de ella, tal vez a influenciado en mi más de lo que me gustaría admitir.

—¿Que encontraste?—me paré detrás de ella.
—Mira—me mostró un maletín con la cara de Amokumon—si aquí hay basura del primer coliseo académico esto definitivamente no es parte, pero tiene contraseña.
—Déjame intentar—me paso en maletín y me senté a su lado—son 4 dígitos, ¿una fecha tal vez?—ella solo se inco de hombros y me pasó un papel.
—Estaba junto al maletín.

Era un papel con unas palabras escrita.
Recuerda que el nacer es escribir una historia, una que siempre marcará a otras personas.
—¿Una pista?—pregunté en voz baja.
—Seguiré buscando—Akira se levanto—tú trata de descubrir la clave.

Pose mis dedos en el código, no comprendo, recuerdo muchas frases filósofas, pero ninguna parecida está, tal vez esté personalizada para mi o Akira, si ese es el caso... habla de nacer, ¿tal vez uno de nuestros cumpleaños?.

2-4-0-7

Contraseña Incorrecta

El mío no es.
—Naegi, dime tu cumpleaños—grite.
—¿Para que?
—Solo hazlo.
—24 de diciembre—conozco a alguien que nació ese día, pero... ¿quien?, la imagen de una chica de ojos morados y piel pálida apareció en mi mente, sentí un fuerte dolor de cabeza, mierda ¿que me está pasando?, ¿de donde vienen mis dolores de cabeza?, a lo mejor tiene que ver con el gas.