Draco no entendía ni una sola cosa del quidditch, es decir en teoría sabía cómo funcionaba, pero porque alguien querria jugar estaba por sobre él.
Primero que nada jugaban con escobas mágicas — que literal eran pedazos de madera flotantes — cientos de metros sobre el piso lo que significaba que una mala caída bien podía costar les la vida fácilmente, luego estaban esas pelotas que prácticamente sólo querían golpear a quien se les cruzará lo que no le parecía para nada seguro, y que convencía más aún a Draco de que el juego fue diseñado como un método de homicidio más que un juego, y alguien que probablemente odiaba a los niños y era fiel consumidor de hongos mágicos — y no de los que usaba su Tío Sev en sus pociones si no de los que Sia probó en Ámsterdam en sus años mozos — decidió que sería un deporte fantástico para poner en escuelas, porque poner a niños sobre delgadas escobas voladoras a decenas de metros en el aire con pelotas homicidas ¡era una idea tan fantástica! Oh y luego estaba la Snitch, una pelotita dorada que quitaba el punto a todo el bendito juego, que te daba 100 puntos, lo que significaba que el equipo pudo haber dado el mejor esfuerzo de su vida, pero que si su rival hacia un trabajo de mierda pero sí lograba atrapar la pelota con alas ganarían el partido.
Yep, Draco no entendía porque tanto alboroto por el estúpido juego, quizás todos los magos excepto el no tenían sentido común, y quizás tenían venas sadicas y suicidas que desconocía, eso explicaría bastantes cosas para ser honestos...
— ¡Draco! — Le llamó alguien cuando estaba por ir a cenar con sus amigos y se detuvieron para ver al trío dorado, y oh Ron no se veía muy feliz —Draco se felicito mentalmente por poder reconocer su estado de ánimo al primer intento — y eso no podía ser bueno — ¿Es cierto? — Pregunto parecíendo molesto y Draco miró a Justin quien entendió y enseguida comenzó a traducir para el.
—¿que cosa? — Contestó Justin parecíendo igual de confundido que Draco, y Ron los miró a ambos antes de responder.
— El idiota de Nott ha estado presumiendo todo el día que irías con el a apoyar a Slytherin en el partido de mañana. — Explico el pelirrojo y esta vez Draco miró a Zac.
— Theodore Nott, así se llama el que te pidió ir al partido. — Contestó a su pregunta silenciosa y muy bien, ahora tenía algo con lo que trabajar.
— Tan solo accedí a ver el partido con él. — Tradujo Justin y Draco cada día se convencía más de que ya no podía vivir en la sociedad sin él.
— ¡¿Porque harías eso?! — Ante el grito de Weasley todos sus amigos tejones dieron un paso delante cubriendo a Draco. — Nott es una sucia serpiente, no deberías juntarte con él.
— ¿Que tienen de malo las serpientes? — Pregunto Draco usando su voz.
— Son mentirosas, manipuladoras y sucias — Dijo lo último con cierto desprecio y Draco dio un paso adelante dándole una cachetada a Ron
— Retira lo dicho. — Ordenó viéndole herido y a Ron al igual que el resto le costó darse cuenta de que estaba pasando hasta que un profesor se acercó atraído por la pelea.
— Señor Malfoy, 10 puntos menos a Hufflepuff la violencia es nunca la solución. — Dijo la profesora Sprout parecíendo desilusionada de su alumno pero Draco no tenía en si mismo preocuparse por eso ahora.
—¡Habló mal de los Slytherin! — Se defendió sintiendose molesto como nunca antes en esta vida, apretando sus labios.
— ¡Porque son malvados! — Respondió Ron dejando su sorpresa de lado para defenderse. — ¡Son traidores y seguidores de quien no debe ser nombrado!
ESTÁS LEYENDO
It Was Really Not that Kind of Game.
HumorMuchos niños mágicos descubren su magia rebotando, haciendo explotar muebles o otras cosas fantásticas, Draco descubrió su magia gracias a los recuerdos de su vida pasada. ¿El gran problema? Estaba bastante seguro que su hermano jugó un juego de cit...