Una Nueva Vida

CAPITULO 24

La instalación estaba hecha, todos en el pueblo harían una celebración de agradecimiento al forastero por hacer que muchas familias pudieran comunicarse. Matsuri miraba alegre como todos en el pueblo hacían la decoración, tomando fotografías a cada uno de ellos y sus increíbles colores al adornar. Gaara y Shinki habían salido a comprar algo de comida mientras todos en el pueblo le saludaban con respeto. Le hacía recordar a Suna cada momento ya que ahí no solo lo respetaban sino más bien le temían.

- No pueden estar aquí - les decía Matsuri al verlos en una tienda comprando

- Shukaku tiene hambre y nos hemos quedado sin comida en la casa - respondió Shinki con una bolsa de croquetas en manos

- Está bien, les tomaré una fotografía

En ese momento ella sacó su cámara y se alejó para tomar aquella fotografía, Shinki estaba emocionado mientras Gaara solo la observaba. No había pronunciado palabra alguna a pesar que Kankuro le había recomendado poder acercarse a ella. Irían almorzar con Shinki tal vez si la invitaba pero Yuna estaba cerca del lugar en busca de Gaara para felicitarlo.

- Me gustaría que vengan a mi casa para invitarlos al almuerzo - decía ella ignorando el echo que Matsuri se encontraba en el lugar, ella no había olvidado lo de aquel día donde ella le hacía entrega de la chaqueta de Gaara frente a su cara

- Debo irme - dijo ella ignorando lo que Gaara estaría dispuesto a contestar

- No vendrás? - le dijo él acercándose a donde ella estaba

- Está bien, es un día para festejar deberían ir con ella.

- Matsuri!- le gritaban de lejos unas señoras - Ven almorzar con nosotras.

Gaara había perdido su oportunidad de invitarla ella simplemente se estaba alejando de él, sino fuera por Yuna él la hubiera llevado a comer con él y Shinki, Matsuri se veía hermosa esa tarde con esa minifalda y botas. Tal vez si se lo hubiera pedido antes a ella hubiera aceptado pero él no era así. Yuna sonrió al verla irse.

- Matsuri - llamó la atención de todos al mencionarla para que no se fuera

- Señor Gaara debería... - trató de convencer Yuna a él para que la dejara pero solo la ignoró

- Vendrás a comer con nosotros - Ella lo miró rápidamente, no se lo había pedido si no más bien parecía una orden de parte de él. Las señoras al escuchar eso se despidieron con la mano y se marcharon sin decir nada, Matsuri parecía molesta pero al ver que ellas se fueran Yuna sonrió pero a la vez se sintió ofendida al ver que él no le prestaba nada atención.

- Creí que vendría a comer a mi casa señor Gaara - le decía ella colocando sus asquerosas manos sobre él

- Solo si Matsuri se niega almorzar con nosotros iré - respondió él esperando una respuesta de parte de Matsuri

- No puedes hacer eso - le dijo ella un poco molesta - no me has preguntado si estaré ocupada o si quiero comer contigo.

- No quieres!?- le preguntó él

Matsuri suspiro al escuchar aquella pregunta, miró a Shinki y se agachó para estar a su altura - lo que sea para estar al lado de mi niño - respondió ella  acariciando su cabeza

Yuna molesta soltó su brazo para así irse del lugar, Matsuri por primera vez se sentía importante, él realmente le importaba su opinión. Gaara podía entender que ella amaba a su hijo, realmente le gusta ello a pesar de no decirlo Matsuri era la mejor mamá para Shinki, caminaron juntos a la casa y cocinaron por primera vez juntos. Gaara ayudaba en lo que podía, Matsuri era buena cocinera y preparaba los mejores platillos para ellos.