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Christopher: siempre tan vanidosa -muerde su labio- ¿iremos a almorzar o vas a rechazar a tu mejor amigo?
Tn: depende a donde me lleves, hoy estoy presentable -bajo mis lentes para verlo- ¿qué dices?
Christopher: esto no me molestaría tanto si nunca te hubiera hecho caso, ahora esos lentes están haciendo que quiera besarte.
Tn: no me has saludado, solo viniste con aires de señor descortés.
Christopher: si te beso no iremos a almorzar, y tengo muchísima hambre en este momento.
Tn: esta bien -rio- espera que hago esta costura y ya vamos, ¿me pasas los alfileres de el segundo estante? Por favor -comienzo a pasar la tela por debajo de la máquina de coser- este vestido será hermoso, no tengo dudas.
Christopher: ¿de quién es? -me entrega los alfileres- me gusta el color.
Tn: es para mi -lo miro por encima de los lentes- tengo una ceremonia de modistas a fin de mes y quiero que sea perfecto.
Christopher: de eso no tengo dudas.
Tn: no tenemos que decirnos cosas tiernas Velez, no funciona así cariño.
Christopher: te he dicho que el vestido saldrá perfecto, no que te quede perfecto a ti.
Tn: vas a arrepentirte de tus palabras engendro del demonio, vas a desear no haberlas dicho jamás.
Christopher: te vez mejor desnuda -me mira, sonríe y luego vuelve la vista a su teléfono-
Niego con la cabeza y termino los primeros retoques del vestido, salimos del local y caminamos hacia el Mac Donald más cercano del centro. Nos sentamos en su auto luego de comprar y comenzamos a comer, hablamos de cualquier otro tema y escuchamos música desde su celular, me siento bien en el momento que esto pasa y eso me hace sentir segura de que nada se arruino entre nosotros aunque nunca dejo de insinuarse y comportarse como un perverso maníaco, tampoco nunca dejo de hacerme reír con su risa.

DECISIONES. -terminada-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora