•DIECISIETE•

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AMNESIA

— ¡Cosmos! ¡Cosmos! —gritamos a brío.

El rubio concluye su baile extraño con unas volteretas que chispean a todos de sudor. Asqueada me limpio el rostro y me rio algo fuerte, busco con la mirada algún otro movimiento que no sea del tambaleante Cosmos y descubro a la pomposa de Halley acercarse con dos mini copas repletas de algún liquido verde seguramente muy extraño.

—Tienes que probarlo—me sugiere ofreciéndome una de las mini copas—. La he probado y me ha encantado.

— ¿Y que se supone que es? —pregunto entre risas.

—Yo que sé—murmura, tomo la copita y la miro extrañada, las últimas veces que deje que Halley me consiguiera el alcohol, no resulto agradable—. Vamos, a que esta divino.

Espere unos segundos hasta que la ojimorado se tomó el líquido verde sin hacer la más mínima mueca. Si, estaba loca por aun así seguir bebiendo, pero era gracioso hacerlo. Así que levante el líquido hacia Halley y luego lo bebí de un solo trago.

Dulce.

Creí que tenía sabor distinto, pero Halley tenía razón, estaba divino.

—Te lo dije—comento triunfante a la vez que alzaba los brazos para comenzar a bailar.

Iba a unirme a su gracioso y muy tonto baile, pero el reloj de muñeca comienza a sonar, cuando Júpiter me lo ha dado hoy en la tarde menciono que estaba preparado para sonar a las 02:00AM, esa sería la alarma de irnos al campamento.

Me levanto de puntillas para buscar al pelinegro, lo descubro en la barra haciéndole compañía a Luna. Aun no me podía creer que él y Vega se hubieran besado hace unas pocas horas y que tuvieran una relación a escondidas de la comandante, era algo extraño imaginarme a Vega o a Júpiter siendo romántico con otra persona, y peor aún, entre ellos.. Así que me acerco teniendo en cuenta de que no hemos cruzado palabra alguna desde que el juego termino.

Saco la idea de mi cabeza cuando decido acercarme a la barra. Aunque ya había visto el disfraz de militar de Júpiter, mientras me acercaba notaba lo bien que se le notaba el trasero con esos colores opacos y...

Me detengo en seco ante ese pensamiento, creo que si había bebido más de la cuenta.

—Buenas madrugadas—les saludo entre risas, apoyo ambos codos en la barra— ¿De qué hablan?

—De su beso con Vega—responde Luna.

Júpiter pone los ojos en blanco y bufa.

— ¡Oh sí! A mi igual me ha dado asquito—concluyo la oración con una risa cómica.

— ¿Por qué te ríes tanto? —pregunta Júpiter.

—Es obvio, esta borracha—responde Luna a el castaño—. Y en cuanto a ti... —me señala con el resto de una cereza—... Sí, el beso fue asqueroso.

Ambos reímos tan fuerte que el bar ténder nos pregunta si estamos llorando o riendo, Jupiter se deshace de él diciendo que estamos ebrias y ya. Calmando un poco las risas tomo un par de respiraciones y astillo mi rostro.

Noto que Jupiter no deja de verme con las cejas en una línea fina, esta serio. Aunque, ¿Cuándo no?

Vuelvo a reír a la vez que astillo mi rostro un par de veces. Debo dejar de reír, es extraño. Me siento algo cansada, aunque no era para menos, ya era un día agotador. Júpiter sostiene mi muñeca por unos segundos mientras ve el reloj que me ha dado, comenta algo con Luna de lo cual ambos se ríen y se vuelve a mí con los ojos grises entrecerrados.

AMNESIA © [COMPLETA] ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora