Capitulo 34

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Narra Valentina

-¿Qué hace usted aquí?- pregunto Alejo al verme llegar con Villa

Olvidaba que eran Don Información que no les importa

-Solo paseaba y llegué- corte el tema

Alejo me miró con los ojos ente cerrados, para después dirigir la mirada hacia los pasos que se escuchaban detrás de nosotros. Isaza ya había llegado

-Buenos días, querubines- saludo con una sonrisa coqueta

-Hola, Isa- saludé

-¿Qué hubo, mi perro?- saludo Villa

-¿Usted qué hace aquí?- pregunto Isaza. Supongo que era la pregunta que iban a hacer todos

-Ayer estuvo enferma, y la cuidé- dijo simple Villa, con una sonrisa

-Ella dijo...- empezaba a hablar Alejo

-Ya llego- le interrupí al ver el autobús llegar a la parada.

Los tres de aseguraron de que fueran los Vargas y Juan en ese, para después subir

-Mira quien se digno a aparecer- hablo Martín al verme

-Hola, amigo- saludé sentándome alado de el -Te tengo muchas cosas que contar- susurré lo suficientemente alto para que solo él escuchará

-Claro que sí.

- Ya no me quieres, ¿verdad?- hablo Juan con voz aguda.

-¡Cómo crees eso!- dije cargandolo para sentarlo conmigo -Eres el niño más maravilloso que conozco- dije dejando besos por todo su rostro -¿Cómo no te voy a querer?

-Te estás convirtiendo en mamá- bajó la mirada -Te vas y no te veo está que tú quieras

-Perdón, mi niño- alce su pequeña cabeza. Me sentía mal conmigo misma por su actitud, siempre había visto que lo hacía su mamá, pero las mismas veces estaba ahí para sacarle una sonrisa

-¿Hoy vamos a estar juntos?- sus ojos brillaban con esperanza y un toque de alegría. Enserio odiaba verlo así por mi culpa

-Perdón, chaparro- volvió a bajar la mirada -Tengo que ir...

-No importa- espetó, alzando la mirada -Ya no importa, Valentina- ya habíamos llegado a la escuela

Se levantó de un brinco del asiento y bajó del autobús. ¿Qué diablos le pasaba hoy?

-¡Juan!- grite el verlo bajar del autobús -¿Qué carajos te pasa?- dije cuando llegue detrás de él - Te pudo haber pasado algo- relaje mi voz

-¿Acaso eso te importa?- ¿Cuando se volvió un adolescente con problemas? - ¿O lo haces por que tienes que llevarme con vida a casa?

- No tiene por qué hablarle así- habló Juan Pablo, con voz suave

La mirada de Juan no se despegaba de mis ojos. Estaba muy enojado y era más que obvio que, por primera vez, no iba a escuchar a nadie. Al menos esperaba ser la excepción. Voltee a ver a Villa, quien estaba detrás de mí. ¡¿Jesús, este hombre tiene algún defecto?!

-¿Vi, puedes dejarme sola con él?- hablé viéndolo -Está a la defensiva- Villa asintió con una leve sonrisa y dejo un beso en mi mejilla -¿Ya me vas a decir que carajos te pasa?- hable cruzandome de brazos

-Ayer estuve solo...- deje que siguiera hablando -Mamá salió con papá, no tengo idea a donde fueron, pero regresaron hoy en la mañana- siguió -La única persona que estuvo fue la mujer que llegó

Una Vida Juntos- Juan Pablo Villamil/Morat.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora