| 44 | Liam.

314 24 2
                                    

*Narra Vince*

Alison nos contó que se quedaría a vivir aquí, en Los Ángeles, que terminaría sus estudios y luego trabajaría. Al parecer, ella y Diego ya han mirado apartamentos para vivir juntos, si a ella eso la hace feliz, pues a mí también.

Cuando Liam se durmió, lo metí en la cuna, que estaba justo al lado de nuestra cama, por el momento, dormirá en nuestra habitación porque está muy pequeño.
Apagué la luz dejando la habitación iluminada por la televisión y me tumbé al lado de Alina.

─ me alegra que los dejes estar juntos.

Suspiré.

─ sé que es mayor de edad, pero para mí sigue siendo mi niña, mi hermana pequeña,
sólo he pensado que si él la hace feliz y los dos están enamorados, pues yo también soy feliz.

Sonrió.

─ si eres así con tu hermana, puedo imaginarme cómo serías si tuviésemos una niña.

─ no se le acercaría ningún chico hasta los 40 años.

─ sí, lo que tú digas -acarició mi pecho desnudo.- gracias gordo, gracias por darme ese angelito.

Sonreí.

─ gracias a ti, tú fuiste la que aguantó el dolor.

Me puse de frente hacia ella y acaricié su mejilla.

─ te amo, mami.

─ yo te amo a ti, amor -la besé. Me siguió el beso. Colé la mano por la sábana y la llevé su culo, sonrió en medio del beso.- tienes que esperar un poco más, ayer dí a luz a tu hijo.

Sonreí y pegué mi frente en la suya.

─ está bien, es sólo que tengo muchas ganas.

Me dió un beso pequeño y sonrió.

─ descansa, princesa.

Se abrazó a mí, la abracé más fuerte.

─ tú igual, amor.

Desperté varias veces en la noche porque Liam despertaba y se ponía a llorar.

•••

─ gordo, vas a llegar tarde al trabajo.

─ me dieron dos semanas de vacaciones por el nacimiento del bebé, ¿no te dije?

─ no. Entonces sigue durmiendo -besó mi mejilla y se bajó de la cama.
No tardé en dormirme otra vez.

Me desperté sobre las 11 y me asee. Salí de la habitación y la busqué. Estaba sentada en el sofá con Liam en brazos. Le estaba susurrando algunas cosas mientras tenía una de sus manitas sujeta. Sonreí y me acerqué.

─ buenos días a mis dos personas favoritas -me miró sonriendo.-

─ buenos días amor -me senté a su lado y le di un beso pequeño, luego cogí a Liam.-

─ hola cosita preciosa -besé su pelo.-

─ te ves tan tierno con Liam en brazos.

Sonreí.

─ soy tierno, perdona que te diga.

Ella se echó a reír.

─ ajá, muy bien. ¿Quieres café?

─ sí por favor.

Meses después.

Salí de la ducha, me puse la ropa interior y luego el pijama que Aurora me regaló en navidad, nos regaló el mismo a los tres, y los tenemos puestos porque es sábado y pretendemos estar tirados en la cama viendo los dibujos animados favoritos de Liam.
Miré hacia la cama, Alina estaba usando el móvil y Liam estaba boca a abajo, con la capucha del pijama puesta y mirándome.

Sonreí y me acerqué, él sonrió mostrándome sus encías

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Sonreí y me acerqué, él sonrió mostrándome sus encías. Lo cogí y lo levanté, empezó a reírse provocando que yo lo acompañase.
Cuando mickey mouse empezó a cantar, él puso toda su atención a la televisión. Negué sonriendo y volví a dejarlo en la cama, Alina nos estaba mirando.
Desvié la mirada hacia mi hijo otra vez, me senté a su lado, lo cogí y lo senté en mis piernas, él seguía mirando la televisión.
Alina y yo estamos...no sé cómo decirlo...supongo que enfadados, o al menos creo que ella está enfadada. Todo cambió la primera vez que tuvimos relaciones sexuales después de que naciese Liam, me obligó a apagar la luz para que tuviésemos relaciones, no me dejó desvestirla mientras estuvo la luz encendida.
Luego, al día siguiente, quise hablar del tema, pero ella se negó diciendo que no era de mi incumbencia, así que terminamos discutiendo.
Le pedí perdón, y por supuesto que me perdonó, pero desde ese día nada es igual, llevamos estos meses muy distantes, lo poco que hablamos tiene que ver con el niño y listo, no tocamos palabra sobre ningún tema más.
Así que estoy confundido, no sé si es que no quiere que la vea desnuda o que simplemente ya perdió el amor por mí, si se tratase de esta segunda opción, mi corazón quedará irremediablemente roto, porque a pesar de que estemos así, yo la sigo amando con la misma intensidad que la primera vez que la ví.

•••

Al día siguiente, en la tarde, yo estaba sentado en la alfombra del salón con Liam, ambos estábamos jugando.
Cogí su peluche favorito y se lo acerqué a la cara haciéndole cosquillas, él empezó a reírse, sonreí.

─ voy a salir -paré de jugar y la miré. Tenía una camiseta ajustada, resaltando sus pechos, y el vaquero que tenía puesto, le hacía unas curvas impresionantes.-

─ estás preciosa -miró a Liam unos segundos y luego volvió a mirarme.-

─ ¿te importa quedarte con él y darle la leche? -fruncí el ceño.-

─ es mi hijo, Alina.

Asintió. Cogió a Liam y lo levantó, besó su pelo y lo miró.

─ te amo -escuché que le susurró. Lo dejó nuevamente en el suelo y se alejó.- nos vemos luego.

Me quedé observando por dónde se fué, a los segundos escuché la puerta de la entrada ser cerrada.

─ papá -miré a mi hijo.-

─ ¿cómo acabas de llamarme?

Levantó sus brazitos para que yo lo cogiese.

─ papá -mis ojos se cristalizaron. Lo cogí, le dí besos por todas partes y luego lo abracé.- tu primera palabra y tu madre ni siquiera ha estado presente -lo separé de mí y lo senté en mis piernas de frente hacia mí.- te amo Liam, eres mi vida entera -acaricié sus mejillas.-

Cuando mi móvil empezó a sonar, limpié mis mejillas y dejé nuevamente a Liam en la alfombra, me puse de pié y cogí el móvil, era Diego, hablamos un momento y luego colgué.

─ el tío Diego y la tía Alison quieren que vayamos a su casa, así que vamos a prepararnos -lo cogí del suelo y fuí a la habitación.-

Mi sexi profesora //TERMINADA//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora