| 45 | Lo siento Vince.

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*Narra Vince*

Cuando entramos, Alison sacó a Liam de su cochecito y besó su cara.

─ hola príncipe -mi hijo la miraba atentamente.- ¿y Alina?

─ no sé.

Frunció el ceño.

─ ¿cómo que no sabes?

─ salió y punto, no dijo a dónde -froté el puente de mi naríz con la punta de mis dedos y solté un suspiro.- ¿y Diego?

─ en el salón.

─ ¿puedes darle la leche? está su bolso, ya sabes que le gusta un poco caliente.

Asintió.

─ ¿todavía siguen igual? -preguntó.-

─ sí -acaricié el pelo de Liam.- hoy me dijo papá -la miré a ella. Sonrió.-

─ al menos eso es algo bueno, imagino que Alina se puso feliz al escuchar su primera palabra.

─ ella acababa justo de irse -dejó de sonreír.-

─ lo siento hermano, yo no que-la interrumpí.-

─ tranquila, yo tampoco quería llegar a este punto con Alina, supongo que perdió el interés.

─ Vince -volví a interrumpirla.-

─ dale la leche a tu sobrino -besé la frente de ella y fuí al salón.- hermano -me miró.-

─ bro -se puso de pié y nos abrazamos, luego me senté a su lado.- ¿Alina y Liam?

─ Alina salió no sé a dónde, y mi hijo está con Alison.

─ ¿siguen sin resolver el problema?

─ creo que no tenemos nada que resolver, tal vez simplemente ha dejado de amarme y no es capaz de decírmelo. A lo mejor se está viendo con algún hombre -sentí cómo me dolió el corazón al pronunciar esa frase.-

─ ¿qué? no, ni hablar, yo soy testigo de lo mucho que ustedes dos se han amado cómo para que acabe así, a parte, tienen a Liam.

─ lo has dicho en pasado, ¿ves? porque estos meses parece que murió su amor por mí.

Suspiró.

─ quise decir que soy testigo de lo mucho que se aman -negué con la cabeza.-

─ desde las primeras semanas de nacimiento de Liam, ha dejado de demostrarme amor, y todo simplemente porque no quiso que hiciéramos el amor con la luz encendida y tampoco quiso explicarme.

Estuvimos en silencio unos segundos.

─ ¿tú la amas? -lo miré con los ojos cristalizados.-

─ amo a esa mujer con toda mi vida, cada día que pasa la amo más que el día anterior, pero parece que no soy suficiente para ella, parece que no le importo, parece que ya no existo para ella, y me duele que estemos así, sobre todo porque creo que soy el único que está sufriendo con esta situación.

Acarició mi hombro.

─ lo siento Vince, no está bien que ella te haga daño de esta forma, tú no lo mereces, no has hecho más que amarla y cuidarla.

─ pero al parecer eso no ha bastado.

Limpié mis mejillas.

─ ¿has hablado con Aurora? -negué con la cabeza.- pues habla con ella, son mejores amigas, debe saber qué está pasando.

Estuve en silencio unos segundos, luego me puse de pié.

─ ¿a dónde vas?

─ a casa de Aurora -fuí a la cocina y me acerqué a mi hijo, me agaché delante de Alison, que estaba sentada con él en las piernas.- te amo mi amor.

─ papá -sonreí.-

─ sí, papi te ama -besé su frente.- eres lo mejor de mi vida -miré a Alison.- ¿puedes quedarte con él un rato? iré a casa de Aurora.

─ por supuesto, ve tranquilo.

─ gracias amor.

Me puse de pié y besé el pelo de ella. Salí del departamento y bajé.
Logré parar un taxi, dí la dirección de Aurora cuando el taxista arrancó.

                                   •••

─ por favor Aurora, ¿no ves que lo estoy pasando mal? estoy perdiendo a la mujer de mi vida sin siquiera saber porqué.

─ te juro cariño que te estoy diciendo la verdad, no sé que le pasa, estos últimos meses ha estado muy rara y por más que le he preguntado, no ha querido hablar.

─ ¿me juras que me estás diciendo la verdad?

─ te lo juro Vince.

Nos estuvimos mirando unos segundos en silencio, luego asentí.

─ gracias -iba a alejarme cuando me abrazó, cerré los ojos dejando que resbalasen unas lágrimas por mis mejillas.-

─ hablaré con ella -cuando nos separamos, limpió mis mejillas.- lo siento tanto, Vince, desde luego que tú no mereces esto.

─ gracias Aurora, debo ir a buscar a mi hijo.

─ por supuesto, nos vemos pronto.

─ hasta pronto.

                                    •••

Esa noche Alina llegó tarde, yo me estaba quedando dormido.
Cogió su pijama y se fué al baño, al rato volvió vestida, apagó la luz y se tumbó en su lado, dándome la espalda cómo siempre, ninguno dijo nada.

Al día siguiente desperté yo primero, me dí una ducha y me puse el uniforme, ella ya no estaba en la cama.
Salí y fuí a la cocina, ella estaba haciendo su desayuno mientras Liam estaba sentado en su trona jugando con una cuchara de silicona.

─ papá -dijo nada más verme.-

─ ¿ha dicho papá? -nos miró sorprendida. Miré a mi hijo sonriendo y me acerqué a él, lo saqué de la trona y besé su mejilla.- es la primera vez que habla.

─ no, no es la primera vez, ya me había dicho papá -dije sin mirarla.- yo lo vestiré.

Salí de la cocina y fuí a la habitación de Liam.
Le puse una ropa y luego lo abrigué, en la guardería ya lo ducharían.
En su bolso metí lo necesario y lo cogí.

─ ¿sabías que te amo? -le susurré, él sonrió cómo si me entendiera, sonreí.
Salí y fuí a la cocina.- ya nos vamos -nos miró, se puso de pié y se acercó a nosotros, besó la mejilla de Liam y le susurró un "te amo".
Lo senté en su cochecito y salimos de casa, puedo ir caminando porque por suerte la guardería queda cerca de casa.

¡¡¡CHICAS!!!

SE ACERCA EL FINAL😈

Mi sexi profesora //TERMINADA//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora