| 42 | Ni en mis sueños.

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*Narra Vince*

Me dí una ducha y me puse una ropa cómoda.
Cogí las pantunflas de ella y se las llevé, cuando las vió sonrió.

─ gracias amor.

─ un placer princesa.

─ te calentaré la comida.

─ no, tú quédate ahí, lo haré yo.

─ vale.

Ellas siguieron hablando, yo entré a la cocina.

                                    •••

Apagué todas las luces y fuí a la habitación. Cerré la puerta y me acerqué a la cama.

─ en la mañana te había dicho que lo haríamos en la noche, pero estoy muy cansada.

Sonreí.

─ lo sé princesa, sabía que estarías cansada, no te preocupes.

Me tumbé a su lado y pasé las sábanas por encima de mí.

─ ¿qué tal tu primer día?

─ muy bien. Me gusta el trabajo.

─ me alegro.

─ gracias princesa.

Estuvimos unos minutos en silencio. Suspiré y la miré, me estaba mirándo.

─ ¿por qué no haces la pregunta?

─ ¿qué?

─ princesa, sé que quieres preguntar si las  mujeres de allí me miraron -suspiró.-

─ voy a dejar de preguntarte esas cosas, te lo prometo, no me gusta ser así y tampoco quiero incomodarte a ti con el mismo tema siempre, sé que me amas y que no me engañarías, el problema lo tengo yo, que debería confiar más.

Me acerqué y la abracé, luego pegué mi frente a la suya.

─ te amo mami, y siempre te amaré.

─ ¿aunque peleemos?

Mordí mi labio sonriendo.

─ aunque peleemos, te seguiré amando, soy incapaz de amar a otra persona que no seas tú.

Me miró a los ojos.

─ te amo, gordo.

─ yo te amo a ti, princesa -la besé, me siguió el beso.-

                                  •••

Sábado.

Alina y Aurora estaban en la cocina terminando de cocinar, Josua, Diego y yo, estábamos en el salón hablando de temas sueltos.
Aún faltaba la señora Charlotte, dijo que antes de venir, tenía que hacer algo importante, no quiso decir nada más.

Ví a Alina salir de la cocina con los platos en las manos.

─ perdonar chicos -me acerqué a ella y cogí los platos de sus manos. Sonrió. Me acerqué a la mesa y los puse.- ¿en qué más te ayudo?

─ pon los vasos, los tenedores y los cuchillos.

─ vale.

Cuando terminé de poner la mesa, volví a acercarme a los chicos, me senté y volvimos a hablar.

Mi sexi profesora //TERMINADA//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora