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Era lunes y Chris estaba mucho mejor, pero no irá a clase. Me estaba poniendo la ropa cuando empezó a moverse en la cama. De repente abrió los ojos y me miró.

- ¿Buen día?- el susurrando

- Buen día. ¡Me voy, está bien!- hizo una mueca de tristeza.

Me acerqué y le di un suave beso en los labios. Me abrazó y me olió.

- Te extrañaré.- Me aparté y sonreí.

- Son solo unas horas, tu madre ya viene. Después de la escuela me iré a casa y luego volveré. Queda bien, ¡te amo! - Chris tomó mi rostro y me dio un suave beso.

Tan pronto como estacioné el auto, los chicos pronto se acercaron.

- Buenos días Joel, ¿cómo está Chris?- Richard habló

- Buenos días, como viste ayer. Recuperándose poco a poco.

- Pronto estará bien.- Richard habló y vi a quién no quería ver.

Fuimos a la cafetería antes de que comenzara la clase y pedi un café solo, ese hombre solo me estaba mirando. Miedo era lo que estaba sintiendo.

- Bueno, me voy, necesito hablar con el entrenador.- Richard se fue.

- ¿Qué era Joel? ¿Estás bien?- Zab habló y asentí.

- ¡Si estoy!- dije tratando de creer mis palabras.

Sonó el timbre de entrada y nos levantamos, Lo miré y ya no lo vi. Erick y Zab fueron sus clases. Estaba caminando a mi salón de clases cuando sentí una mano en mi boca y la persona que me arrastraba a una pequeña habitación.

- Ni siquiera pienses en gritar, de lo contrario te mataré aquí mismo.- Estaba paralizado. - ¿Te gustó volver a verme, Joel?

- ¿Que quieres conmigo?  Déjame salir.- dije tratando de irme.

- No, te quedarás y estarás callado, creo que olvido lo que me hiciste.- Me tomó la barbilla con fuerza.

- Déjame ir.- Lo empujé.

- Mira cómo me hablas.- Me tomó del brazo con fuerza, me dolía.

- Déjame ir, duele.- dijo y presionó más fuerte.

- No, y cállate.- lo decía en serio.- Si no, tendrás la misma distinción que tus padres.- Lo miré con miedo.

- ¿Qué hiciste con mis padres? ¿Cómo sabes dónde están?- pregunté curioso.

- Hice lo que debería haber hecho hace mucho tiempo, y ahora están en el infierno, yo mismo los envié allí.- dijo y tuve miedo.

- Estás mintiendo, no sabes dónde están mis padres.- se echó a reír.

- Usted no sabe nada, tus padres obtuvieron lo que merecían por haber matado a mi padre. - Estaba en shock, no podía creer lo que dijo.

- Christian, ¿de dónde sacaste eso? Mi padre no es un asesino.- se echó a reír.

- Realmente no conocías a tus padres.Tu padre fue mucho peor.- Comencé a llorar. - Vine a buscar todo lo que le pertenece a mi padre que su padre robó. Y creo que es bueno para ti colaborar.

- Dónde están mis padres, dónde están? yo Pregunté llorando.

- Muertos.  Hice el trabajo yo mismo, Tuve ese placer.- dijo sonriendo.- quiere ver ?

Negué llorar, chritiam me atrapó, abrió su celular y puso un video. Mis padres atados a una silla. Escuché el disparo y cerré los ojos.

- No, porque hiciste eso.- dije llorando.

{Mi refugio} "Virgato"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora