Marco Asensio acaba de fichar por el Real Madrid. Guapo, joven y seguro de si mismo, pero sin suerte en el amor.
Claudia vuelve a Madrid después de pasar un año lejos de casa para retomar su vida de nuevo.
Ella, la chica rebelde. La chica prohibid...
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Claudia y yo nos casamos pasado mañana. Sólo quedan dos días. Casi no puedo ni creérmelo. Que ella dijera si a casarse conmigo y encima aquí en Mallorca...es lo que siempre he deseado. Tengo unas ganas enormes de que llegue el domingo. Cuando vea el sitio donde se va a celebrar la boda, lo va a flipar. Igor ha acertado de pleno. Se ha encargado de todo lo de la ceremonia. Tenemos suerte de que tanto mi familia como Isa y Álvaro nos hayan echado una mano. Nos lo hemos repartido todo y la verdad es que a estas alturas está todo controlado.
Claudia se ha encargado de la tarta, no me quiere decir de que es porque dice que es una sorpresa, al igual que su vestido. Les he preguntado a las chicas y sólo me han dicho que me voy a caer de espaldas. Si sólo con verla desfilar para convertirse en mi mujer ya me tiene rendido a sus pies. Los anillos los he elegido yo. Quería algo sencillo y bonito, así que espero que le guste. La comida la hemos elegido entre todos, no va a ser la típica comida de boda. Vamos a comer las cosas que nos gustan, y sí, va a haber macarrones picantes.
Faltan un par de detalles que en la noche de hoy se van a solucionar. Esta noche Claudia va a elegir a sus padrinos, ha estado esperando hasta el último momento para decidirse, y sé que le ha costado mucho. Ha tenido que hablar con sus hermanos para explicarles su decisión y ellos la han aceptado sin problemas.
Ya están prácticamente todos aquí. Los últimos, como no, Álex y Natalia, han llegado esta mañana. Entre las casas de mis amigos y la nuestra, los hemos alojado a todos. Esta noche hemos preparado una especie de despedida de solteros aquí en casa con todos nuestros amigos. Isa y Sara se han encargado de la decoración. Les ha quedado muy bonita. Y aquí estamos de barbacoa improvisada.
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Claudia está hablando con las chicas. No para de sonreír y de buscarme con la mirada cada vez que tiene ocasión. Sé que está feliz y yo también. En nada vamos a ser una familia. Ya lo éramos, pero ahora como que es más oficial y se me hincha el corazón sólo de pensarlo. A partir del domingo, va a ser mi mujer, de pleno derecho. Y no es que no lo fuera, que va, es mi mujer desde hace tiempo, pero ahora todos sabrán que lo es, que es mía. Mi móvil vibra en mi bolsillo y lo cojo. Es un mensaje. Lo miro y sonrío. Contesto y me lo guardo. Voy hasta Claudia y la beso en la mejilla.
