el tweet que cambio mi vida

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EN EL CAPÍTULO ANTERIOR:

Después ella suspira con fuerza y yo también. Terminamos, pero la siga besando y acariciando. Ella se acuesta en mi pecho, yo le acaricio el cabello y le beso la frente. Ella toma mi mano. Soy tan feliz.

Hoy es el mejor día de mi vida y sé que también para ella. Nos amamos y cualquier problema que llegamos a tener ha desaparecido, somos felices y estamos juntos.

_______: Mi cuerpo ha sanado y mi corazón también. Y los dos son tuyos.

En eso escuchamos al capitán del barco decir con los micrófonos: -Si alguien sabe dónde se encuentran el chico y la chica del accidente, haga el favor de comunicármelo. Han desaparecido.

Y ______ y yo nos soltamos a reír.

*DIRECTIONER*

La costilla facturada, hipotermia en primera fase, fiebre, dolor de cabeza y catarro. 

Es ese el resultado que ha sufrido mi cuerpo por caer del barco al agua helada. A Louis le ha ido mucho mejor que a mi, el sólo tiene un refriado muy fuerte y la muñeca fracturada. 

El doctor nos dio ordenes de permanecer en cama, cobijados, bajo medicamento. Ninguno de los dos reclamamos, pues la idea de estar los dos en cama nos parecía tentadora. Pero no nos permitieron dormir en el mismo cuarto, así que, rebeldes como somos, ignoramos las instrucciones del doctor y escapamos de la cama en cuanto pudimos.

¿Cómo se supone qué debería sentirse una chica que ha pasado de ser niña a convertirse en mujer? Pienso en todas las personas que perdieron su virginidad con la persona equivocada, pienso en las personas que tuvieron su primera vez porque fueron obligadas, pienso en aquellos que sin estar seguros de querer hacerlo, lo hicieron aún con dudas. Pienso en los que perdieron su virginidad teniendo sexo… y no haciendo el amor.

¿Y yo? Yo soy muy afortunada. Lo hice en el momento exacto, en un tiempo adecuado, estando completamente segura, lo hice con la persona que amo y simplemente fue perfecto. Soy feliz y es una sensación difícil de entender.

Siento un cosquilleo en mi estómago, siento un agradable calor en el pecho, siento a mi corazón latir fuerte y con prisa, siento mis mejillas arder sonrojadas, siento una frescura, casi como si hubiera vuelto a nacer, y siento una estúpida enorme sonrisa en mi rostro. 

Parece que el mundo está igual de feliz que yo, el aire sopla, el sol brilla, las personas ríen, el agua azul y clara del mar refleja mi estado de ánimo.

Louis y yo caminamos agarrados de la mano, subimos a la terraza (es asombroso que después de lo que pasó sigamos amando ese lugar, pero es nuestro nidito de amor) y contemplamos el paisaje en silencio.

Es una sensación indescriptible, es asombrosa la conexión que nace entre dos seres humanos que se aman y se han entregado completamente al otro, en cuerpo y en alma.

Es casi como si después de haber tenido relaciones sexuales, los dos cuerpos se hicieran sólo uno, los corazones sólo uno, el alma sólo uno.

Y sé que por el resto de mi vida, siempre tendré esa conexión especial con Louis, aunque no sea él con quien pase el resto de mi vida. Pero siempre recordaré la noche de ayer con mucho cariño y alegría.

Olvidaba lo hermoso que era su cabello despeinado brillando bajo los rayos de sol, su sonrisa amplia y honesta, y lo que más amo de él: sus ojos.

Olvidaba lo agradable que es tomar su mano, olvidaba el poder que tiene Louis de desaparecer a todo y todos alrededor sólo con un abrazo. 

Y ahí estamos, en la terraza, abrazados, sintiendo el aire por nuestras caras y alborotando nuestro cabello, sintiendo el calor del sol y la brisa del mar. Y me siento contenta, me siento realizada y me siento completa.