La peor noche

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El bosque era oscuro, la luna apenas brillaba detrás de las nubes grisáceas que cubrían el cielo, por correr tanto mi cuerpo ya no sentia el frío, pero de igual manera cobije mi vientre.
Ya estaba lo suficientemente lejos, aunque no se en dónde estoy ahora mismo, simplemente corrí y corrí hasta que mi cuerpo no me dejó hacerlo más, mi sentido de la orientación estaba desconcertado y en realidad toda yo estaba desconectada.
Las manos me temblaban, mis ojos estaban húmedos y rojos, la garganta me dolía.

¿Qué puedo hacer ahora?, simplemente caminar y caminar en linea recta, no quiero recordar aquello que mis ojos vieron, me dolió... Dolió muchísimo.

Apenas era media noche y por la salud de mi bebé yo tenía que descansar y comer algo, subí a la copa de un árbol para observar el alrededor y poder encontrar un lugar donde quedarme.
Observé humo a lo lejos tal vez era una cabaña, o una morada, a unos cuantos kilómetros parecía estar. Sin pensarlo mucho corrí hacia allá, los árboles tapaban la vista y no sabía que era exactamente. Espero que ahí viva alguien amable que sepa comprenderme.
Finalmente llegué, me restregue el rostro con las manos, para ocultar un poco mi llanto, no quiero preocupar a nadie.
Toque la puerta, me abrió un joven rubio y de ojos cafés.

-¿Hola?- me saludo un poco desconcertado
-Siento tanto interrumpir, pero no tengo donde pasar la noche...y- la interrumpio
-Pasa hace mucho frío afuera- la tomo de la mano parecía preocupado.
-No quiero incomodar, solo necesito un lugar donde quedarme, pagaré por él-
-Descuida, soy Yoshida Yuki- sonrió amablemente parecía gentil.
-Uch...Haruno. Haruno Sakura- Duele...

-¿Eh?, ¿Estás embarazada? ¿Qué hace una chica embarazada caminando sola en la noche?- noto su vientre, su tono de voz era realmente de alguien preocupado.

Intentar responder esa pregunta solo hacia crecer el nudo en mi garganta de nuevo, no quiero hablar sobre eso, no quiero regresar de donde vine, y no puedo regresar al lugar de donde soy...sería una vergüenza dar la cara después de irme sin decir una palabra.
¿Cómo puedo contestarle sin llorar?

Agaché la mirada en señal de no querer hablar, y al aparecer lo entendieron.

-Será mejor que comas algo- cambio el tema de conversación.
Sakura dudó un poco en si realmente podía confiar...no estaba bien quedarse con un joven, podría hacerle algo.
Yuki al ver su indecisión, volteo a verle.
-Te presentaré a mis hermanas- quería hacerle sentir confianza, sabía que no aceptaría quedarse con un hombre.
Haruno levanto la mirada en sorpresa, como sabía...
-Ven, ya deben estar durmiendo, te quedaras con mis hermanas en su habitación- la guío a un pequeño cuarto.
-Hey, despierten- el rubio despertó a sus hermanas poco a poco.

-¿Quién es ella?- señaló una pequeña niña rubia con pijama azul señalando a Sakura con una mano y frotando sus ojos con la otra.
-¿Hermano?- la voz de otra niña con las mismas características pero con pijama verde.
-Sakura, ellas son mis hermanas. Son gemelas, la de verde es Kyomi y la de azul Kyoko-
-Soy Haruno Sakura- se presentó..
-ella pasará la noche aquí, ¿podrían ayudarla?- sonrió a sus hermanas
-Si, yo puedo dormir con mi hermana y ella en mi cama- ofreció dulcemente Kyomi.
-Siii- exclamó con entusiasmo Kyoko, mientras su hermana saltaba a su cama con alegría.

-Bien, puedes acomodarte, traeré comida para ti- Yuki salió de la habitación.

-El color de tu cabello me gusta mucho- una de las gemelas llamo su atención.
-¿puedo tocarlo?- pregunto la otra niña.

-Si, si pueden- Sakura trato que su sonrisa no reflejará amargura.
-Es un color muy bonito, jamás había visto a alguien con el cabello rosa-
Después de acariciar su cabello, Kyoko camino a su claset, y saco un par de cobijas.
-Deben tener frío- noto su embarazo
-Y ¿que es lo que tienes en la frente?- era Kyomi otra vez, ella realmente tenía curiosidad.

No sabía que contestar, no quería ocultar algo a quienes la estaban ayudando, sin embargo tampoco quería decirlo, no quería decir quién era ella en realidad.

-Un recuerdo de mi maestra...- tal vez no diría todo, solo lo necesario.

Al momento llego Yuki con un plato de comida.
Sakura comió con ganas, tal vez ella no tenía hambre, pero no iba a dejar pasar el alimento para su hijo o hija

Después de que las niñas entraran en un sueño profundo, pidió usar el baño para poder prepararse para dormir.

-Sabes... Partiremos en dos días, tenemos que ir con mis padres- Yuki hablo.
-¿Cuántos días necesitas quedarte?
Veo que eres viajera- Hizo contacto visual

-La verdad no estoy segura- en seguida bajo la mirada al suelo. Y es que en realidad no sabía que hacer al despertar, por la mañana el dolor seguiría, y ella también tenía que seguir...sola.

-Puedes venir con nosotros, de camino tenemos una ciudad, puedes entonces quedarte ahí. Me sentiría más aliviado de no dejarte sola con tu bebé en el vientre- fue muy considerado.

-la verdad es que no puedo pasar tantos días aquí...- sabía bien que tenía que continuar con su camino, pues no quería que el padre de su hijo la encontrara.

-Ya veo... entonces...- estaba un poco triste.
-Necesitas descansar- se retiró de la habitación.

Sakura se recostó en la cama, ya era un poco incómodo recostarse con su vientre.
Se acomodo de costado, puso sus manos en su cabeza recargando el peso. Miro la ventana, la noche se veía fría.
Trataba de no recordar, quería que su memoria olvidará todo lo que había visto, quería no haber escuchado nada, seguía doliendo...
Dolía por dentro...
Te desgarra desde adentro...
Un vacío en el corazón...

Una vez más, las lágrimas cayeron...

Un viaje juntosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora