»◦✿◦« Capítulo 27 »◦✿◦«

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Durante la primera hora, Kagami estuvo llamando a Adrien sin parar. Él acababa de irse así como así y nunca hacía eso a menos que fuera algo serio. Rayos, ella habría ido tras él, si supiera a dónde había ido. Pero no había podido, así que lo llamó varias veces y dejó una docena de mensajes. Luego trató de llamar a otros, llamó a su trabajo pero nadie lo había visto y hasta donde ellos sabían, nada desastroso había sucedido.

Sabía que no debía llamar a Gabriel.

Llamó a sus amigos americanos pero ninguno lo había visto. Deseó saber el número de alguien de MIRACULOUS porque tenía el presentimiento que alguno podría tener la respuesta. Pero no sabía sus números y había pasado mucho tiempo desde que estuvo relacionada con alguno de ellos.

Sola en casa, Kagami empezó a preguntarse por qué Adrien se había ido así. Qué habría podido pasar que había sido tan urgente pero que los demás no sabían?

Esperó a que él regresara pero después de dos horas, fue claro que no regresaría. Volvió a llamarlo – no hubo respuesta.

Vagó un poco por la casa, sintiéndose incómoda y casi enferma. Algo estaba mal, Adrien nunca la dejaba - no así. Lo que sea que haya sido, era quizá la misma cosa que había estado manteniéndolo lejos de casa antes.

Algo relacionado con MIRACULOUS? Algo más? no podía estar segura pero lo que sea que fuera, tenía pendiente a Adrien.

Trató de pensar en algo más. Pero mientras más lo intentaba, más inquieta se sentía con respecto a todo. Algo estaba mal, y esta vez Kagami supo que no podía culparse a sí misma. No, esto no era sobre ella, esto era sobre algo más, algo que estaba pasando con Adrien.

Se sintió enferma, sintió que las cosas se salían de su control y antes de poder detenerse, corrió al baño y vomitó todo lo que había comido durante el día. Fue un impulso violento, tanto que perdió el uso de sus piernas por algunos minutos y se sentó débil y temblando en el suelo del baño.

Cuando pudo alzar el brazo, se sostuvo la puerta del gabinete – intentado usarlo para ponerse de pie. Pero cuando lo intentó, la puerta de gabinete se abrió, jalándolo y enviándola nuevamente al suelo.

Kagami gruñó, alzó la mirada y se congeló. Estaba por cerrar la puerta pero ahora que estaba abierta, un paquete de pastillas llamó su atención. No eran suyas. Eran de Adrien?

Se arrastró hacia la puerta del gabinete y gentilmente revisó. Sacó las pastillas, las miró y sintió que su cuerpo se sacudió cuando vio qué eran.

Viagra.

Ella no era tonta. Kagami no podía mentirse al creer que Adrien simplemente las había usado por accidente. O que tuviera alguna otra razón para tenerlas.

Sabía por qué las tenía y ahora sabía por qué él le había saltado encima la noche anterior. Él necesitó viagra para tener sexo con ella?!

Soltando las pasillas, Kagami se recostó contra la pared y sintió que su respiración se entrecortaba. Jadeó y sintió miedo, toda una poderosa idea se formó en su mente. Era ella, él ya no la deseaba, era ella.

Justo entonces, la puerta principal se abrió y Emma entró corriendo con Luka. Se habían divertido mucho, primero fueron al cine, luego a comer, y Emma estaba emocionada por contarle a su padre cada detalle. No notó que el auto de Adrien no estaba. Estaba aferrada feliz a la manga de la ropa de Luka, mientras sonreía.

Kagami casi jadeó cuando escuchó que su hija y Luka regresaron. Secando sus ojos furiosamente, se obligó a actuar. Se echó agua a la cara, guardó las pastillas en su bolsillo y se miró al espejo un par de veces antes de salir, luciendo más como si acabara de lavarse el rostro. Afortunadamente, no había tenido tiempo para llorar y estropear su rostro.

Coeur de Cender (Corazón de Ceniza) (Adrinette) AU +20Donde viven las historias. Descúbrelo ahora