Coeur de Cender (Corazón de Ceniza) (Adrinette) AU +20

»◦✿◦« Capítulo 21 »◦✿◦«

El agua ya se había enfriado, Adrien podía sentir el frío pero no le importaba. Salir del baño significaba que debía encarar su vida. Los pilares de su vida, para ser exacto, el pequeño maquillaje para su corrupción, inconsciente de sus posiciones en la vida de Adrien. Kagami estaba en el hospital por esta noche, y Adrien había negociado con su manager tener el día libre. Sabía que Emma iría con él por la noche, sabía que debía sostenerla y calmarla. Lo haría. Pero no aún.

Adrien estaba peleando, con todo lo que tenía. Necesitaba resistir contra el sentimiento de ya no importarle nada. Eventualmente, encararía el final a solas pero no hoy, no así, dejando atrás tanta destrucción. No recogería los trozos de sí mismo, pero colocaría un muro alrededor de ellos, los protegería, los atesoraría y nunca los revelaría. Necesitaba hacer lo que Marinette había hecho antes. Un muro, construiría uno tan fuerte que aguantaría días, viviría con normalidad, y entregaría sus noches a la soledad que seguiría y seguiría, hasta que sus días llegaran a su fin y los grandes y respetados hombres de su época se asegurarían que él fuera olvidado a mitad de la historia, haciendo de su secreto algo seguro y sagrado.

No llamaría a nadie.

No a Nino.

Ya no.

Adrien cerró los ojos y respiró profundamente, se deslizó hasta estar completamente bajó el agua y dejó salir un sollozo, descartando el pensar en ahogarse ahí mismo, y valientemente salió de la bañera, envolviendo cualquier tipo de protección alrededor de su traición, las piezas de su alma y corazón. Tal vez con el tiempo...también pueda engañarse.

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Su departamento estaba a oscuras, ni un solo fluorescente encendido, así como tampoco las luces de la entrada. Solo una lámpara estaba encendida. La lámpara de lava anaranjada y amarilla que tenía pero que casi nunca usaba.

Sentándose a mitad de la cama de Gina, Marinette miró la lámpara iluminando y burbujeando silenciosamente al final de la cama. Miró las burbujas flotando antes de eventualmente bajar.

Se curvó, descansando su mentón en sus rodillas, envolvió sus piernas. Su cabello estaba húmedo por la ducha y la dulce esencia de fresa llenó el aire justo cuando se sentó y miró la lámpara.

Gina la golpearía...tal vez. Marinette siempre la imaginó tomando su lado sin importar qué hiciera pero la realidad era que esta vez casi había destruido una familia - y también había destruido a Adrien. Se tragó las lágrimas, manteniendo secos los ojos mientras miraba la lámpara. Marinette no lloraría, había gritado, se había jalado los cabellos y había llorado mucho en la ducha pero ya se había terminado. Tenía que superarlo.

Deseaba no estar sola, pero no había nadie a quien pudiera llamar...nadie a quien quisiera llamar, la verdad. La única persona a la que habría aceptado a este punto sería a la misma Gina.

Ella habría entendido qué estaba mal con ella y ella no habría tenido que repetir lo que sentía...decir en voz alta lo que le había hecho a Adrien...lo que estaba haciéndole a Adrien.

A Adrien y a familia.

Ahora mismo, no quería nada. Nada de comida, Marinette dudaba que tuviera apetito por algún tiempo. No quería moverse, no quería salir, no quería llamar a nadie...solo quería desaparecer.

Estiró una mano hacia la lámpara, acariciando ligeramente la caliente superficie. Marinette había pasado el punto de la desesperación, lo sabía. Este era el punto del no regreso y no podía tener de regreso a Adrien. No ahora que sabía lo que su affair había estado haciéndole a Kagami y a Emma. Marinette no podía permitirlo. Su consciencia no le dejaba.