El detrás de mí pasado. (Tom Holland y tú)

Solos, tu y yo 1.0

-Entonces, ¿solo comenzó a transpirar de la nada?-. Dijo Leo y rió al otro lado de la pantalla.

Exacto, mi mejor amigo se había ido al igual que mis padres. Leo tomó provecho del vuelo de mis padres y decidió ir con ellos, además de que yo le supliqué aquello para que cuidara lo más que se pudiera a mi padre.

-Así es...-. Rasqué mi nuca y sonreí de lado.

-Y, ¿han hablado desde esa vez?

-No, ni un mensaje nos hemos enviado. Mucho menos una llamada-. Una expresión de decepción se tornó en mí.

Definitivamente el hecho de haberle dicho "Mi Tom" no fue la mejor idea. Tal vez estoy apresurando las cosas y eso hizo que el actuara tan nervioso en ese momento.

Esta bien imaginar un futuro al lado del chico que te gusta, pero a pesar de ello siento que ambos no estamos listos para una relación. Quiero decir, no nos conocemos del todo y mucho menos sabemos en su total de cómo es el otro en cuanto a personalidad.

-Oye,-. Dije matando el silenció que invadió aquella llamada. -ya iré a dormir. Son las tres de la mañana y mañana iré a trabajar, de nuevo-. Sonreí de lado.

-Oh, cierto, olvidé lo del cambio de horario-. Sonrió. -Descansa, enana.

-Nos vemos, jirafón-. Ambos reímos para luego colgar la charla.

Cerré el computador y sin nada más que hacer me levanté de la silla de mi comedor y caminar agotada a mi cama. Mis párpados pesaban y aunque platicar con Leo era lo mejor de la vida mi cansancio era el mayor de mis problemas en ese momento.

Al llegar a mi cama lo primero que hice fue recostarme de lado, tomando mis sábanas y frazada para cubrirme lo más posible y dormir como un bebé. Pero de nuevo esos pensamientos fugases invadieron en su total mi mente, Tom.

Aquel castaño con ojos color avellana y rizos alocados llenaban cada rincón de mi cerebro. ¿Acaso estaba haciendo lo correcto en intentar "esto" que tenemos?.

Ahora más que nunca necesitaba de mi hermana, aquella compañera de aventuras y con quién siempre compartí toda vida. Mi hermana, mi mejor amiga, la quería junto a mí.

Mi cariño hacia él ya no era solo un te quiero, sino algo mucho más que eso. Podía sentir en cada espacio de mi corazón que lo que sentía hacia Tom sobrepasaba aquellos límites que alguna vez puse en mí.

Cada vez mis pensamientos me comían más y más, pero por fin entendí lo que me corazón trataba de decir: estaba enamorada de él. Estaba enamorada de Tom.

•••

Tom

Tal vez, no, por supuesto que he sido el más estúpido del mundo. Prometí a Hazz llamarla y disculparme por ser un idiota la noche en qué ella dijo que era suyo.

Definitivamente me sentía la persona más feliz al escuchar eso, pero el solo oír como si voz deleitaba esas dos palabras: Mi Tom sentía una carga de electricidad devorando mi cuerpo y por supuesto un inmenso calor en el.

Esta vez ya no sería un completo estúpido, esta vez sería diferente. Invitaré a ____ a una cita. Ahora solo espero que no me mandé por un tubo por no hablar con ella en estos días.

*Llamada saliente a: "Panquesito"*

-¿Si?

-Dios, ____. Creí que no contes...-. Interrumpió.

-¿Estás bien? Son las cuatro de la mañana, Tom.