En Una Boda - EUNKOOK (+18)

Capítulo 48 - FINAL

    ADMITÍA, que él no era el mayor experto en este tipo de cosas. Pero por lo que Jungkook podía decir, la boda Jung-Jeon fue un gran éxito.

De pie junto a la barra en la esquina de la sala, inspeccionó la elegante escena delante de él. Los invitados se mezclaban entre mesas con manteles de lino color marfil decoradas con centros de mesa de rosas y orquídeas iluminadas por velas. La banda tocaba "What A Wonderful World" de Louis Armstrong, mientras las parejas bailaban en la pista del salón de baile, y a través de las puertas francesas abiertas vio más invitados en la terraza, riendo, hablando, y admirando la vista del lago.

Incluso algunas señales menores no habían empañado el espíritu de la noche. El improvisado, y un poco confuso, brindis del tío JoonPyo en el que entusiastamente había pedido a todos que brindasen por "Soobin y Yeni". Un momento ligeramente incómodo en la línea de recepción cuando la abuela de Jungkook se subió a su pedestal mencionando la alta tasa de divorcio entre los "chicos en estos días" mientras le hablaba al padre de Yeji y Eunbi que se había casado tres veces. El apacible mohín de la prima HyoJung, quien, después de tintinear su copa de champán casi sin parar durante el curso de la ensalada, había regresado del baño para encontrar sus copas de cristal misteriosamente sustituidas por plástico.

La mirada de Jungkook se desvió a la izquierda, hacia el vestíbulo, donde vio a Eunbi subiendo por la amplia y curva escalera detrás de su hermana. En una mano sostenía la cola del vestido de Yeji; parecía tener algún tipo de desperfecto en su vestimenta, aunque las dos estaban riendo mientras caminaban por los escalones. Abajo en el nivel principal, el fotógrafo se escabulló para poder capturar el momento, mientras Jungkook trataba de decidir qué era lo más cautivante: la sonrisa de Eunbi, o el vestido palabra de honor color champagne que rozaba cada una de sus curvas. Entre eso, las ondas de sirena de su pelo rubio, el delineador de ojos ahumado, y los tacones de tiras, él apenas había podido apartar los ojos de ella mientras caminaba hacia el altar durante la ceremonia de la boda.

Ayer habían tomado la decisión de mantener la situación entre ellos en secreto, no queriendo restarle nada a la gran noche de Yeji y Soobin. Aunque ciertamente había habido una gran cantidad de largas e íntimas miradas durante la cena de ensayo, habían jugado sus roles de padrino y de dama de honor como era la costumbre y no habían hecho nada para manifestar que ellos mismos eran una pareja.

Entonces, durante los brindis de la noche anterior, cuando los dos estaban sentados el uno junto al otro en una mesa con sus familias, Eunbi había dado la mala noticia.

—No puedo esperar a tenerte sola esta noche —le había dicho Jungkook en voz baja, hablando en el oído de Eunbi mientras todo el mundo se echaba a reír cuando Soobin contó una historia divertida sobre su padrino de boda BeomGyu.

—Oh... olvidé mencionarlo: No iré a casa esta noche —dijo—. Pasaré la noche en una suite con Yeji en el Four Seasons. Pensamos que facilitaría las cosas por la mañana, ya que la iglesia está justo cruzando la calle desde el hotel.

No.

—Esta boda está empezando a convertirse en una seria patada en mi trasero —gruñó Jungkook.

Eunbi se rio, apretando su muslo tranquilizadoramente por debajo de la mesa.

—Eso no ayuda con la situación aquí, Jung —Pero le guiñó un ojo, aplaudiendo junto con todos los demás en respuesta al brindis de Soobin, del que no había oído una palabra.

Una hora más tarde, después de poner al día a Soobin y Yeji sobre el hecho de que, sí, Jungkook y Eunbi eran oficialmente un "nosotros", las dos parejas se dijeron sus adioses en el hotel Four Seasons. No queriendo entrometerse en la despedida de sus hermanos en el vestíbulo, Jungkook se quedó fuera con Eunbi para tener su propio momento privado.