Capítulo 36

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     EL lunes por la tarde, Jungkook irrumpió en la oficina del FBI por un interés personal.

Cuando salió a buscar un sándwich rápido para el almuerzo, había recibido un correo electrónico de Jimin que, al parecer, se había dejado caer por el edificio del FBI para entrevistar a un testigo de otro caso, y quería "hablar" con Jungkook mientras estaba allí.

Después de salir del ascensor, Jungkook se dirigió por el pasillo y dobló la esquina donde se encontraba su cubículo. Vio a Jimin, charlando con Taehyung en el cubículo frente al de Jungkook.

—Oye, justo estábamos hablando de ti —dijo Jimin.

Jungkook cruzó los brazos sobre su pecho, llegando a ellos.

—¿La trampa? ¿Realmente tenemos que tener una conversación sobre esto?

Jimin lo miró, como si sintiera su estado de ánimo.

—¿Estás enfadado por mi correo electrónico? Sólo dije que quería hablar.

Kwon se acercó a BaekHyun —enfatizó Jungkook—. Le contó a BaekHyun sobre su grupo de policías y que podían transportar cualquier cosa por la ciudad sin ser pillados. Le preguntó a BaekHyun si podía ponerlo en contacto con alguien que pudiera estar interesado. ¿Es eso una trampa?

—Yo no dije que lo fuera —respondió Jimin con calma—. Lo que digo es que, en un caso donde el FBI está actuando encubierto ya sea como comprador o como vendedor de mercancías ilegales, tenemos que asegurarnos de tener evidencias fuertes.

Jungkook se burló. En general, le gustaba trabajar con los fiscales de la Oficina del Fiscal Federal. Realmente lo hacía. Y en lo personal, él y Jimin habían sido buenos amigos durante años y él respetaba totalmente al tipo. Pero a veces, en ocasiones, los fiscales se quedaban tan envueltos en ser abogados y preocuparse por el panorama que olvidaban que estos eran los agentes que trabajaban en campo todos los días, poniendo sus traseros en primera línea para conseguirles a los fiscales las evidencias que necesitaban para mantener sus puestos de trabajo.

—¿Y cómo es que el testimonio de BaekHyun no es suficiente evidencia?

—Sólo estoy mirando esto a través de mi perspectiva sobre las evidencias — dijo Jimin—. BaekHyun es un criminal convicto. Preferiría no basar toda mi refutación de cualquier defensa posible, únicamente en su testimonio. Por lo tanto, cuanto más podamos sacarle a Kwon hablando en la grabación sobre los otros trabajos que han hecho, mejor.

Taehyung intervino aquí.

—Lo que, como justo le estaba explicando a Jimin, creo que tenemos cubierto —le dijo a Jungkook. — Le he contado cuan hablador ha sido Kwon y lo mucho que has podido sacarle durante tus encuentros.

—Eso es todo lo que necesitaba escuchar —dijo Jimin—. Me estoy asegurando de que tengamos nuestros puntos sobre las íes y nuestras tes cruzadas en este punto, a fin de que no tengamos un problema más grande en el futuro.

Bueno... bien. Jungkook suponía que eso no sonaba del todo irracional.

—Bien. Me alegro de que tengamos eso aclarado —dijo de mal humor.

Ahora que el polvo se había asentado, Jimin lo miró de arriba a abajo.

—Parece como si alguien se hubiera saltado su Vainilla Latte descremado esta tarde. ¿Todo bien?

Jungkook se encogió ante eso.

—Claro, todo está bien —Se sentó en la silla de su escritorio.

En Una Boda - EUNKOOK (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora