Payton estaba yendo a la estación del bus porque tenía que ir al gimnasio de su mamá, Joanne. Y cómo el auto de ella estaba en reparación, Payton le dio el de él; por eso tenía que ir en bus. Cuando iba a llegar al gimnasio, Dylan iba a estar ahí.
Cuando se subió al transporte público, tuvo que ir parado. No porque no había espacio, pero quiso ir así.
Vio a una chica que estaba escuchando música, supuso, por sus auriculares. Miraba el piso y movía el pie de arriba abajo, inquieta. Payton, se paró al lado de ella. Después de un rato parado, sus piernas empezaron a doler. Estuvo parado mucho tiempo. Miró el piso y se topó con la chica de cabello castaño.
Esta movió la cabeza ligeramente y el chico se dio cuenta de que ella estaba llorando. Payton escuchó algo, juró que era su corazón romperse, pero fue que a una señora se le cayó el frasco de mermelada al piso. Quería que la castaña sonriera o algo.
Entonces, se le ocurrió que tirar su celular al piso era buena idea para mirar y asegurarse de que si estaba llorando. Pero como idiota que es —así se tituló el en ese momento— se golpeo la cabeza contra el asiento que estaba frente a ella. Ella levantó la mirada y sonrió ante ese acto gracioso. Aún con lágrimas en los ojos y la nariz roja sonreía. Él se quedó mirándola como bobo. Era hermosa.
...
—No —se negó ante Dylan—. Tengo que hacer algo.
—¿Y qué vas a hacer? —le preguntó Payton, medio desesperado.
—No lo sé todavía. Pero algo voy a hacer.
—Búscala —soltó Dylan como si eso fuese tan fácil.
—¿Cómo se supone que la busque? —preguntó el peli castaño.
—Mañana, a la misma hora que hoy, súbete al bus y fíjate si está.
Si, decirlo es fácil, hacerlo tal vez no tanto. ¿Si ella tomó ese bus solo ese día porque salió más tarde? ¿Y si tiene auto y no necesita ir más en bus? ¿Y si...?
—Bro —Dylan interrumpió los pensamientos de Payton—, si piensas en cosas que pueden llegar a suceder, no va a funcionar lo que te dije.
Y tenía razón. A veces hay que pensar en positivo, solo cuando más lo necesitas.
—Si, lo voy a intentar. Si no sucede, te mataré —bromeó Payton.
—Como digas —levantó sus brazos en forma de inocente.
...
«Bien Payton, tranquilo, si hoy no está tal vez mañana esté», decían los pensamientos de Payton.
Cuando entró al bus, fue directamente hacia donde Violet se había sentado: en la tercera fila después del conductor. Pero no estaba ahí. Payton dejó de respirar pero volvió a la normalidad cuando la vio apoyada en la ventana, con los audífonos escuchando música. Estaba sola, no había nadie al lado de ella. Era su oportunidad.
—Hola —tartamudeó Payton, saludándola. Se sentó al lado de ella.
—Hola —respondió ella, pero esta vez no sonrió ni nada. Se acomodó un poco en el asiento. Se sacó los auriculares de apagar la música.
«Bien, ahora pregúntale cómo está» habló la voz interior de Payton, de vuelta.
—Ya sé que no nos conocemos pero, ¿te sientes bien? —ella se movió de vuelta y desvió la mirada. Payton, que la estaba mirando, se arrepintió al mismo instante que la chica se movió.
—Ehh, si. Estoy bien —aseguró ella. Payton miró el piso y, luego, la volvió a mirar.
—Lo siento, no me presenté —rió—. Me llamo Payton.
—Mucho gusto Payton, soy Violet.
Se quedaron callados los dos. Violet jugaba con sus dedos y Payton abría y cerraba la boca para decir algo pero nunca lo decía.
Cuando el autobús paró, Violet se paró. Payton se alarmó; tenía que volver otra vez para poder decirle lo que estuvo intentando decirle.
—Oye, perdón, pero me tengo que ir —dijo para que Payton se pare y la dejara pasar—. Ey, Payton —habló, haciendo que Payton devuelva la mirada hacia la cara de esta—, si quieres, te paso mi Instagram para que podamos hablar. Solo si quieres.
—Claro que quiero —oh bueno, eso sonó muy FanGirl.
Payton le pasó el Instagram a Violet lo más rápido que pudo ya que el bus iba a seguir.
—Gracias, Payton. Ya te sigo —y después de decir eso se fue. Pero por lo menos le habló y ahora va a tener su Instagram.
...
—¿Entonces le hablaste? —luego de que Violet se bajara, él llamó a Dylan para que lo pase a buscar en su auto e ir a la casa del segundo. Habían llegado y ambos se sentaron en la cama para hablar bien a detalles.
—Si. Hasta me pasó su Instagram para hablar —le respondió Payton feliz.
—¿Entraste a su perfil?
—No. Es que, en realidad, yo le pasé el mío. Y hasta que me empiece a seguir no voy a poder ver.
—¿Y qué esperas? Fíjate si te siguió —y si, lo empezó a seguir—. La siguen personas que tu sigues.
—Es verdad.
—Si que es linda —dijo Dylan mirando las fotos del Instagram de Violet.
—Si... me rompió el corazón porque estaba llorando y se ve como las típicas chicas que tienen todo perfecto; familia, amigos...
—Mhm —asintió Dylan —. ¿Seguro que no la viste antes? Porque si solo la siguen personas del colegio supongo que es del colegio.
—Más que seguro.
—Bueno... yo no te puedo negar nada porque no voy a tu colegio —que sean hermanastros no significa que van al mismo colegio.
Luego de hablar algunas cosas más sobre Violet, Chris, el papá de Dylan, lo llamó porque necesitaba el auto.
...
Cuando Violet llegó a su casa, gritó, pero nadie contestó. Al principio, se preocupó, pero luego no le tomó mucha importancia. Subió a su habitación y dejó los libros que había traído de la biblioteca. Eran para el colegio.
Agarró su celular para poner música, pero le llamó la atención la única notificación que tenía: «@paytonmoormeier ha empezado a seguirte».
Inspeccionó un poco su perfil. Lo seguían muchas (demasiadas) personas comparado a ella. Los pensamientos de Violet volvieron. «Si que es lindo». Pensó y pensó. ¿Quedaría mal si le manda un mensaje? Suspiró. Cuando tengas la oportunidad, aprovéchala.
@paytonmoormeier:
> Violet: Hola Payton, creo que ya sabes quien soy. Pero uno nunca sabe, soy Violet :).
< Payton: Jajaja. Sé quien eres. Hola, Violet. ¿Cómo estás?
> Violet: Pues bien, ¿y tú?
< Payton: Me alegro, yo estoy bien.
> Violet: Qué suerte.Pasó un rato para que Payton le vuelva a hablar; como casi una hora.
< Payton: ¿Eres de aquí o sólo estás aquí por vacaciones?
> Violet: Soy Latina, pero vivo aquí.
< Payton: Uuh latina. ¿Bailas salsa?
> Violet: Sí y no, jajaja.
< Payton: Violetttt, me tengo que ir a cenar. Después seguimos hablando, ¿te molesta?
> Violet: Claro que no me molesta, después seguimos ;)....
A las tres de la mañana Payton y Violet seguían hablando. Hablaron sobre bastantes cosas, y en casi todas, concordaban con lo mismo.
Juli <3
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Desde Arriba - P.M | NUEVA EDICIÓN
Teen Fiction¿Qué pasa si un día no tienes tu auto y tienes que ir en un transporte público? Él tiene la vida perfecta. ¿Y ella? Todo lo contrario. historia corta. TW: drogas, posible depresión, bullying, enfermedad, suicidio, muerte.