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—Violet, despierta hay que ir a la compañía —le dijo una voz femenina.

Violet abrió los ojos y se encontró con la sonrisa de Stephanie.

—Si —murmuró—, ya voy.

Luego de decir eso, Steffie se fue y ella se levantó para darse una ducha. Hizo su rutina y se cambió; no quería ponerse algo muy simple ni muy formal. Steffie le dijo que la empresa no iba a ser muy, muy importante, pero sí era reconocida. También le dijo que las fotos iban a ser en el estudio, al que iban a ir, y también en la calle.

En fin, se puso un jean ancho, que estaba roto a la altura de la rodilla, y un top blanco cuerpo de seda, con la espalda abierta.

—Que linda que estás —chilló Stephanie al ver a Violet bajar de las escaleras—. ¿Vamos? Ahí ya hay cosas para desayunar —informó.

—Está bien y gracias —Violer sonrió y la otra también—. Esperame un segundito que voy a buscar el celular.

—Claro, te espero en el auto.

Subió, de vuelta, lo más rápido que pudo. Agarró su celular y su cargador. Bajó y fue al auto rápidamente, que estaba en el garage de la casa.

—Tú tienes que estar tranquila —Stephanie abrió el gran portón del garage con un botón—. Allí va a ver un montón de personas.

—¿Como que muchas? —no se alarmó, pero si le dio curiosidad.

—Si, está el chico que te maquilla y te va a ir retocando el maquillaje cada dos minutos literalmente. Después el que te peina, que también te va a peinar cada dos minutos. La chica que me ayuda con las luces y que quede bien las fotos, otro chico que me va ayudando, y yo, la fotógrafa —respondió—. Ah y también va a estar el dueño de la empresa de lentes. Ya sé que es raro, pero son los lentes hermosos. Son esos de colores y formas, bueno eso. No sé, a mi me encantan.

—Si, ya se cual me dices —rió—. Son re lindos.
—Si, bueno... —miró la carretera un rato, seria, y volvió a hablar—, les dije que vas a subir una foto a Instagram para promocionarlos. Ya que tienes muchos seguidores y, también, vas subir las fotos en su página de Instagram.

—Oh, que bien.

...

—Hola Violeta, ¿cómo estas? —le preguntó el dueño de la empresa de lentes, supuso.

—Hola, muy bien. Y dígame Violet, por favor.

—Claro, Violet, ¿vamos a comenzar con las fotos?

—Ehh... —Violet miró para todos lados.

—Disculpe, es nueva ¿recuerda? —dijo Steffie  acomodando unas cosas a la cámara.

—Oh sí, lo siento. Ve con Victoria que ella te va a dar el vestuario y James te maquilla. Está en la segunda puerta a la derecha.

—Claro, gracias.

Fue directamente a donde él le indicó. El lugar era inmenso, pensaba que era más pequeño. Le dijeron que se sentara en una silla, que se parecía a la de los directores de las películas, y la empezaron a maquillar. Violet vio la paleta de sombras y eran tonos nudes.

El chico que la maquillaba le daba charla todo el tiempo. Le dijo que era influencer y hacia TikToks. Al terminar, le preguntó si quería hacer un tiktok con él. La empezó a seguir e hicieron el tiktok; era uno de baile. Ella no lo conocía, así que lo copió como pudo. Al final, no se notaba tanto que se copiaba de él.

Luego, vino una chica con un montón de ropa y le dio lo que se tenía que poner. Era un vestido celeste ajustado casi transparente y un abrigo blanco con un peluche en la parte de adelante azul.

—Que lindo que te queda, ahora ponte estos lentes y ven conmigo que te llevo a donde te vas a sacar las fotos —me dijo Victoria, si no se confundió.

La llevó a un lugar alejado. Era como un baño muy lujoso. Le dijeron que se tenía que sentar en la silla y le sacaban las fotos desde el reflejo del espejo.

Y, después de sacarlas, las subió a su Instagram.

—Bien, ahora vamos a almorzar y te vamos a sacar fotos en la calle para que "modeles" la ropa de una marca. Y, además, vas a usar uno de los lentes de esta marca que te acabamos de sacar las fotos —le informó Stephanie.

—Está bien.

Luego de almorzar, fueron a una calle cualquiera donde no había muchos autos. Se sacó fotos en la mitad de la calle, pero igual fue un caos porque veían autos constantemente. Y luego fueron a una especie de pileta pública pero sin agua.

—Violet, ¿vamos? —le pregunto Steffi, mientras yo agarraba mis cosas.

—Si —terminó de agarrar las cosas y se fueron al auto.

...

—Y, ¿te gustó? —indagó Steffie, cuando llegaron a su casa.

—Si, pero estoy un poco cansada.

—Es normal —explicó—. Luego ya te acostumbras.
Violet asintió y se fue al sofá. Miraba al televisor, que estaba apagado, detenidamente.

—Ve a darte una ducha y después vemos que cenamos, ¿dale? —Violet asintió.

Juli <3

Desde Arriba - P.M | NUEVA EDICIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora