Violet ya está de vuelta donde pertenece: Carolina del Norte.
Despedirse de Steffie y de Thommy fue difícil para ella; más que dejar su casa. Fueron su familia, su apoyo, en todo este tiempo, que lo necesitaba mucho. Lloró como una idiota, según ella. Y no sabía si había llorado más que Thommy. Él fue hasta al aeropuerto llorando ya que su mejor amiga se iba.
Seguía sintiéndose mareada; seguía estando igual que antes. Pero quería ir para despedirse de
Payton.
—¿Quién es? —preguntó la mujer del otro lado de la puerta.
—Soy yo... —murmuró, alto para que la escuche—, Violeta.
La mujer rápidamente abrió la puerta y la abrazó con todas sus fuerzas.
—Te extrañé mucho, hija —susurró, mirándola a los ojos.
Se notaba que había cambiado. Ya no olía a alcohol o cosas ilegales. Era otra mujer cambiada; la que Violet necesitaba.
—Yo también, mami —los ojos de las dos chicas, que estaban en la puerta de la casa, se cristalizaron.
—¿Cómo estás? —la empujo despacio para que entre—. ¿Me contarás que es eso de ser modelo? No entendí nada —si, Violet empezó a hablar con su mamá hace un mes, o dos. Hablaban cada dos días.
—Espérame que dejo las cosas en mi habitación y te cuento, ¿si?
—Si, si —agarró una maleta de su hija y la ayudó a subir la otra que quedaba.
...
Hablaron durante unas cuantas horas. Violet le contó todos los detalles sobre Illinois, Thommy y Steffie, Olivia, su enfermera o mejor amiga. El modelaje y todo lo que le pasó. Desde el día uno.
—Violet —era la primera vez que le decía así. Violet sonrió—, ya son las siete.
Sabía a lo que se refería y estaba muy nerviosa. Iba a ver a Payton después de muchísimo tiempo.
—Si es que no vuelo, ya saber porqué.
—Lo sé —asintió su madre.
Fue a la casa de Payton en Uber. Al llegar tocó la puerta con sus manos sudadas. Después de tocar tres veces en un ritmo, Joanne le abrió la puerta. Ella abrió la boca y, un segundo después, la abrazó.
—Hola —tartamudeó Violet.
—Está arriba.
Eso fue lo único que dijo. Violet ya sabía de qué hablaba. Asintió con la cabeza y entró a la casa. Todo estaba igual desde la última vez que fue a esa casa. Subió las escaleras despacio; tratando de no hacer un solo ruido.
Suspiró delante la puerta de Payton. Estaba cerrada. Se escuchaba que estaba escuchando música y las luces de su habitación estaban prendidas.
—¿Qué? —dijo seco, antes de abrir la puerta. Pero, cuando la abrió, se quedó callado. Quieto como una estatua.
—Eres... —murmuró—, tú.
—Supongo —levantó los hombros.
Él se acercó a ella y le agarró la mano. Tiró de ella hasta que entrase a su habitación y se la miró. En silencio. Rápidamente se acercó a ella y la abrazó.
—Te he extrañado tanto —dijo, y Violet sintió que una lágrima caía sobre su hombro.
—Ya estoy aquí —le acarició el pelo a Payton.
Payton se separó y Violet le limpió las lágrimas. Y Payton hizo lo mismo; le limpió las lágrimas a Violet. La abrazó de nuevo.
Cuando se alejó, juntó su nariz con la de Violet. Las respiraciones de ambos se mezclaron y la besó. Se besaron. Violet juraba que Payton no le iba a hacer eso nunca más, pero se equivocó. Ella necesitaba un beso de él, un abrazo de él; algo de él.
—Se mi novia, por favor —murmuró en tono de súplica. Había rastros de lágrimas en sus mejillas.
Violet frunció el ceño. No sabía si era broma o no; pero si era alguna broma, es una de muy mal gusto.
—Por favor, no quiero que te vayas otra vez. No de vuelta —hablaba cada vez más bajo.
—Si quiero —Violet lloraba; no sabía si iba a durar mucho eso.
—Ya sé que es muy tarde para decir esto pero, Violet, te amo. Desde que llegaste a mi vida, desde que te vi llorando en ese bus. En serio —le dijo mirándome a los ojos.
—Yo también, Payton —le dijo en un susurro. Abrazándolo, pasando sus brazos por el cuello del mayor.
—Te amo, Violet —la besó—. ¡Maldita sea! —gritó—, te amo más que a mi mismo. Siempre te he amado, nunca deje de sentirlo.
Ella rió bajito y lo besó.
—Yo igual, Payton...
Juli <3
ESTÁS LEYENDO
Desde Arriba - P.M | NUEVA EDICIÓN
Fiksi Remaja¿Qué pasa si un día no tienes tu auto y tienes que ir en un transporte público? Él tiene la vida perfecta. ¿Y ella? Todo lo contrario. historia corta. TW: drogas, posible depresión, bullying, enfermedad, suicidio, muerte.