Conejos [ Lan SiZhui x Jin Ling ]

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Animosos, los conejos saltaron alrededor de su lamentable figura, inundándole los pies con una esponjosa alfombra de ojos rojizos y orejas rosadas. Inquietas naricitas ignoraron su tristeza, pasando mullidas patitas encima de su corazón hecho trizas, los trocitos esparcidos en la hierba mordisqueada por la montaña de pelotitas de nube blanca.

Abrazando sus rodillas, recargado contra un árbol, Lan SiZhui se ocultaba.

—¿Vas a quedarte ahí, sin hacer nada?

El que calla otorga, y esa fue la intensión al no responder, inmóvil, sepultado en conejos.

—¿En verdad no harás nada?

Wei WuXian se sentó a su lado, la vista en la escarpada densidad boscosa de Gusu Lan.

—¿Algo cambiará? —preguntó, tras un inusual silencio, el rostro enterrado en las piernas, controlando convulsiones de llanto.

—Puede que no o puede que sí. No sé, y no lo sabrás si no lo intentas.

—Jin Ling se va a casar con una joven ama para restaurar la secta Lanling Jin. La joven ama es hija de la líder de secta actual, una aliada importante, y tiene un alto nivel de cultivo. Es inteligente y noble, además de ser hermosa y...

—¿Poder darle descendencia? —completó Wei WuXian.

Lan SiZhui asintió, desganado. Esa era la diferencia principal, ¡y abismal!, entre la prometida de Jin Ling y él, un hombre.

—Buen punto —concedió su estrafalaria figura paterna—. No hay mucho a hacer al respecto —cruzó los brazos tras la nuca—, pero no fue la razón por la cual Jin Ling accedió a comprometerse con la joven ama Xie.

—¿No? —un destello de curiosidad levantó el rostro de Lan SiZhui.

—No. Piensa un poco. ¿Por qué crees que el terco, altanero, impulsivo, agresivo y obstinado Jin Ling, permaneció soltero hasta esta edad, con la presión de su clan encima?

—Por molestar a su tío —dio una de las razones que le escuchó mencionar, cuando le plantearon una pregunta semejante en una misión de aprendices de distintas sectas.

Recordó esa noche. Los ojos de Jin Ling se cruzaron con los suyos, luciendo un leve e inesperado rubor en las mejillas. Devolvió la vista al frente, y alzó el mentón en una expresión de suficiencia dolorosa de ver. Sus palabras hicieron a unos tragarse la risa y, a otros, dejar los ojos en blanco, exasperados.

Adorable, pensó Lan SiZhui.

Ese entendió cómo veía a Jin Ling en realidad.

Wei WuXian pasó una mano por su frente. Lan SiZhui era lento en los temas del corazón, sí, y Jin Ling tampoco era inocente en la tumba que cavó. Con el tiempo corriendo lo mejor sería evitar las sutilezas. El par no iría a ningún lado de esa manera, sólo caerían en el complicado barranco a cuyo borde ya asomaban:

—Por ti.

Los ojos de Lan SiZhui se abrieron enrojecidos, debido al llanto.

—El mocoso esperaba a que dieras el primer paso. Jin Ling estaba dispuesto a enfrentar a su secta, y a su tío, por ti.

—... Y yo acepté la invitación de Lan ZuXi —siguió la secuencia de eventos nombrando a la joven, una cultivadora prometedora proveniente de una de las ramas secundarias de la secta Gusu Lan—...

—Sí. La aceptaste. Y aunque se trató de mera cortesía, las lenguas viajan rápido. ¿Creías coincidencia que, dos días después, Lanling Jin anunciara el "sentar de cabeza" de su berrinchudo líder? —con el revés de la flauta le dio un golpecito en la sien— Niños —bufó, frunciendo los labios—. ¿Y qué harás? —insistió.

Lan SiZhui tardó en responder y lo hizo actuando: apartó a los conejos, abrazó a su padre, se puso en pie, dio una reverencia de gratitud y montó su espada.

—¡SiZhui! —llamó, arrojándole una bolsa de provisiones, preparada al intuir el resultado de su plática—. ¡Suerte! —se despidió, agitando la mano.

La figura blanca del veinteañero desapareció, y una más grande se presentó.

—Crecen tan rápido —lamentó el legendario YiLing Laozu, apoyando su hombro en el pecho de HanGuang-Jun.

—Mm.

—Y así, unidas, tres sectas terminan su línea de descendencia —comentó casual. Luego de un suspiro, abarcando a su hermano adoptivo y su cuñado, quienes por fin formalizaron su relación, soltó una sonora carcajada.

Festival de 31 BendicionesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora