LOS MUROS DE BASTEAN (PARTE DOS)
«Nos atacan»
Aquellas palabras resonaron en la cabeza de Keera, haciendo que automáticamente tome la mano que Josteil le tendía y se ponga de pie, corriendo al centro de Bastean.
A Keera le sorprendió la organización de todos allí; Zeta gritando órdenes, enviando a los arqueros a las torres, que se movían rápidamente por las escaleras hasta posicionarse en su lugar. La gente —aquella gente que solo había ido a ayudar— le tendía las espadas y hachas y arcos a los guerreros con agilidad, como si hubieran hecho aquellas tareas varias veces.
La fortaleza de Bastean era en sí un mural con solo dos entradas, una por el norte y otra por el sur, que era la que iba a las ruinas de Arathor y ahora se acercaban por el norte, por lo que sobre aquel muro era donde todos se estaban posicionando.
Alexey apareció a lo lejos, llamando su atención con un movimiento de su mano y haciendo que ella rápidamente vaya a su encuentro.
—¿Cuántos? —Preguntó, sabiendo que el vampiro podía sentir aquellas presencias a lo lejos.
—Demasiados —fue todo lo que respondió.
—¿Cuántos, Alexey? —Insistió.
—Cinco mil por lo menos —respondió en voz baja, para que quienes los rodeaban no los escucharan.
Keera comenzó a sopesar de que manera podrían atacar sin morir todos en el intento, pero si tenia que ser sincera consigo misma, no habían muchas opciones a su favor.
Rufo, Diya y Zeta llegaron a su lado, con las miradas expectantes pero una sola mirada de Keera bastó para saber que las cosas no iban bien para ellos.
—Rufo, tu no puedes venir —comenzó diciendo ella y al ver que el cambiaformas quiso rebatir, se apresuró a responder. —Esto es solo una mínima parte de la cantidad de guerreros que ellos tienen y apuesto mi vida a que es solo una misión de exploración —dijo con la mirada seria a modo de explicación—, eres fuerte y te necesito pero serás el factor sorpresa en el caso de que las cosas vayan terriblemente mal.
—Las cosas ya van terriblemente mal —agrego él con enojo.
—Pueden ir peor, créeme —dijo con frialdad. —Zeta, comandaras el lado este y tu Diya el oeste, con Josteil iremos por el centro.
—¿Quién te nombró líder? —Se mofo Rufo.
—Fui creada para esto, Rufo —siseó ella, cambiando su mirada a la de él. —Y ambos sabemos que soy la mejor en esto, ¿o acaso olvidaste quien era la que planeaba las masacres que tu llevabas a cabo? —Agregó con frialdad.
—¿Qué hay de mi? —Pregunto Alexey.
—Si llega a oídos de tu padre que estás con vida y lo hemos engañado todo este tiempo... —Murmuró ella en voz baja y negando con la cabeza.
—Puedo ser de ayuda —dijo él, acercándose un paso a Keera.
—Lo sé —dijo ella con una sonrisa triste. —Pero no podremos tambien contra el ejercito de tu padre, Alexey.
El vampiro sentía una impotencia que le estaba tomando todo controlar, ella lo sabía, lo conocía bien, sin embargo termino dando un leve asentimiento antes de retroceder e ir a por su carcaj, colgándolo en su espalda y corriendo a una de las torres con los demás arqueros.
—Puedes transformarte en un Woolly o una esfinge, Rufo —dijo Keera, intentando apaciguar los ánimos con el cambiaformas. —Pero ellos no pueden saber que eres tú, mantente lo suficientemente lejos para que no te huelan, encárgate de traer a los heridos de regreso y por nada del mundo dejes que te lastimen —agregó al final.
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Mundos Ocultos [Gaia 2]
FantasiaLuego de que la verdadera identidad de Keera fuera descubierta su vida cambia radicalmente. Pasando a ser la nueva prisionera de Belial, nuestra protagonista deberá enfrentarse a nuevos retos y de una vez por todas, hacerle frente a su pasado que -a...