19

672 43 9
                                    

Han pasado tres días y todavía no le había dicho nada a Embry, mi barriga no se notaba pero tenía muchos vómitos y mareos. Mis abuelos a causa de eso lo descubrieron y me felicitaron.

También me regañaron con que se lo tenía que decir a Embry. Rompieron mi cabeza con la charla de que Embry era buen chico, que no nos dejaría. Hoy estoy con ellos y seguían igual a cuando se enteraron,pero alfinal me han dado el valor para decírselo hoy mismo.

Estábamos comiendo los tres y ya mismo llegaba la hora para verlo, yo estaba súper nerviosa.

—Tranquila cariño, él no os dejará—. Me consuela mi abuelo con una sonrisa.

—Lose abuelo, pero estoy nerviosa aún así—.

—¿Te hago una tila?—. Me pregunta mi abuela.

—No, mejor me relajo vaya que a mi bebe le afecte—. Ella asiente, sabía que las tilas no me gustaban,poreso me tranquilicé. Estuve un buen rato con ellos sonriendo y hablando de que le haría mi abuela de ropa al bebé.

Llegó la hora y mis abuelos me calmaron una vez más, me despedí de ellos como siempre y emprendí mi camino hacia mi casa. No se escuchaba mucho ruido, así que empecé a correr y en poco tiempo tenía mi casa delante de mí.

Entré y todo estaba silencioso pero Embry sale de la cocina llorando.

—Embry ¿qué te pasa?—. Le pregunto preocupada,pero no me contesta. Le huelo para ver si tiene heridas pero no tiene nada, intento acercarme pero,se aleja.

—¿Porqué no me dijiste?—. Pregunta, yo no entiendo ahora nada, estoy en shok.

—Tan poco confías en mí para comentarme las cosas, por lo menos para empezar a hacerme una idea—. Me reprocha levantando poco a poco la voz.

—Embry porfavor no me grites—. Le pido con mi voz temblorosa.

—¡¿Qué hubiera pasado si te hubira cogido de alguna forma y te hubiera hecho daño eh?!—.Pregunta gritando aún más, yo ya tenía lágrimas en mis ojos,de repente me enseña la prueba de embarazo con las dos rayas.

—Embry, yo quería decirte pero—. Mi voz suena entrecortada cuando él me interrumpe.

—¿Cuándo Nahla?, él o ella crece rápido. Dime, ¿cuándo?,¿cuando te hubiera hecho daño con cualquier mierda y lo perdiéramos?,¿cuando?—. Ahí me doy cuenta que tiene razón, por el miedo que tenía a que él no lo quisiera también lo puse en peligro a nuestro pequeño. Mis lágrimas empiezan a salir.

—Tenía miedo—. Susurro pero él me escucha, suaviza su expresión y baja su voz.

—¿Miedo?,¿de qué?—. Pregunta abranzandome porque yo estoy llorando.

—De que te alejaras,de que no lo quisieras,de que me obligaras a abortar,de que me abandonaras— Me desahogo mientras Lo miro, me mira sorprendido.

—Nunca podría hacer eso,mira. Yo te noté extraña y tu olor también, me hacía una idea de que podía ser porque me acordé tarde de que no habíamos puesto medidas. Poreso tenía cuidado al tocarte y al hacerte mía,pero estaba esperando a que tú me lo dijeras—. Yo lo miro sorprendida,me coge como una princesa y se sienta en el sillón para seguir hablando.

—Yo esperé los días,ansioso para que me lo dijeras. Dejaba a los pequeños de la manada vigilandote para que no os pasara nada pero que tu no te dieras cuenta. Hoy no podia más y tenía un nudo en la garganta, me sentía mal por que tu no tenias confianza para contarme algo tan importante para mi,asi que vine más temprano y empecé a buscar algo que me dijera las respuestas a mis preguntas—. Se calla y suspira para después mirarme y seguir hablando.

—Después, encontré la prueba y todas mis dudas se resolvieron y encima tenía razón.Lloré de alegría y de tristeza por que tú no confiaras en mí—.Su mirada cristalizada se posa en la mía y me duele verlo así.

—Tu eres la persona en quien más confío, todo te lo digo aunque sea una tontería y lo sabes. Pero esto me sobrepasó, tenía miedo de mí pero sobre todo de tu rechazo,lo siento mi lobo—. Él me mira y sonríe,me quita las lagrimas de mis mejillas y me besa.

—Saldremos adelante,os quiero a los dos y sabes que seremos buenos padres lose—. Junta nuestras frentes y yo sonrío.

También lo sabía y muy bien, me sentí aliviada después de todo estos días porfin ya se lo había dicho y él nos quería.

Me sienta en el sillón al lado de él, me sube el jersey y yo me sonrojo, besa mi barriga y le habla a nuestro cachorro que aún no está formado.

De pronto hace algo que no esperaba y se me escapa una risilla por las cosquillas, está lamiendo mi vientre.

—Embry, ¿qué haces?—. Rio y me mira.

—Marcar lo que es mío—. Alza los dos hombros en señal de "¿qué voy a hacer?".

—Pues me haces cosquillas—. Digo riendo y él para.

—¿Cómo le pondremos?—.Pregunta preocupado.

—Soy malisimo con los nombres—.

—Tranquilo, todavía queda para elegirlos no tiene que Porqué ser ahora, además yo también soy malisima con los nombres—. Digo mientras lo beso.

—Embry, ¿me has perdonado?—. Pregunto triste porque no quiero que siga enfadado conmigo.

—Claro que si nena,eres mi todo no puedo estar mucho tiempo enfadado contigo—. Besa mi frente y sonreímos mientras que yo asiento.

—Estoy cansada amor, ¿porqué no nos vamos a dormir?—.

—Claro nena, vamos—. Dice cogiendome la mano, después de apagar todo y Embry cerrar las puertas con seguro nos fuimos a la cama.

—Te amo amor—.Digo con voz adormilada.

—Yo también te amo pequeña—.Dice dandome un beso en la cabeza. Y como otra noche cualquiera me duermo en los brazos de mi lobo mientras él acaricia mi barriga.

*como vais? espero que bien,bueno es cortito pero a veces la inspiración se va, sinceramente me pone mal que haya tantos lectores fantasmas,pero aún asi espero que me apoyeis dando a la estrellita y comenteis aunque sea que os está pareciendo la historia, bueno no quiero alargarme solo era para deciros que vosotr@s también podéis decir nombres para el bebé de chicos y chicas porque todavía no sabemos qué será dejarme algún comentario,un beso muy fuerte a tod@s y que paséis muy buen dia*

Mi pequeña sirena,yo su lobo (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora