Una semana despuésNo había pasado nada interesante en el transcurso de la semana. Hoy por fin nos habían citado a grabaciones, estaba algo nerviosa, porque era mi primera vez grabando con artistas tan grandes como lo son blackpink.
-Bien chicas ¿Quién quiere iniciar?- preguntó Teddy. Eran las seis y cuarenta de la mañana, apenas y había dormido la noche del día anterior. Supuse que se debía a los nervios de saber que hoy grabaríamos tan esperada canción. Miré los cuatro rostros de las chicas y ninguna mostraba ánimos de querer trabajar.- Vamos chicas, parece como si las hubiesen atropellado.- comentó entre risas, pero ninguna se rió de su tan mal chiste.
-Iré primero.- avisé, esperando a que las chicas reaccionaran.
-¿Estas segura?- preguntó Teddy, poniéndose sus audífonos y arreglando algunas cosas en su consola.
-Sí.- respondí segura de mi decisión.
-Entonces comencemos.- entré a la cabina, me coloqué los cascos y de inmediato se escuchó la pista de la canción. Había ensayado varias veces mi parte en la canción, y sin duda me gustaba el ritmo que tenía esta. Teddy me hizo unas señas para que empezara a cantar, por lo que respiré profundo y comencé a cantar.
-Y cada que pienso en ti...- me dejé llevar por la música, sintiendo como esta fluía con gran naturalidad por mi cuerpo. Al terminar de grabar mis estrofas, salí de la cabina, las chicas me sonrieron y me felicitaron por mi trabajo.
-¡Wow! En serio lo haces muy bien.- me felicitó Rosé muy sonriente.- Creo que no necesitarás arreglos.- reí ante lo mencionado y negué rápidamente.
-Estoy segura de que desafiné en alguna nota.- dije.
-De hecho lo hiciste muy bien.- felicitó Teddy muy sonriente.- Pero debemos grabar las vocales una vez más, para ponerlas de fondo.
-Esta bien.- dije, retomando mi camino hacia la cabina.
.
.
.
-Baegopa (Tengo hambre)- me quejé por segunda vez. Estaba recostada sobre el hombro de Rosé, ambas nos encontrábamos en una cafetería cercana a la empresa.
-Me sorprende lo rápido que aprendes.- dijo esta con una pequeña risilla. Volví a quejarme, ya que mi estómago no aguantaba más sin comida. Mis tripas comenzaron a sonar, alertando de inmediato a la rubia que estaba a mi costado. Rosé bajó su mirada a mi vientre y se acercó a este.- Tranquilo monstruo devora tripas, pronto comerás, sólo espera un poco más, Jisoo y Lisa no tardan en llegar.- la rubia de sonrisa deslumbrante, miró la hora en su teléfono y frunció su ceño. La campanilla de la cafetería sonó, avisando el ingreso de un nuevo comensal. De inmediato mi mirada fue a dar a aquellas dos figuras, las cuales caminaban muy seguras de sí. Simplemente esas dos chicas no parecían ser de este mundo.
-Hola.- saludaron ambas al mismo tiempo.
-Ya era hora, _______ ya estaba por desmayarse.- dijo Rosé, burlándose de mi situación.
-Tampoco es para tanto.- susurré apenada. La mirada de la tailandesa se posó en mí y yo simplemente no encontraba lugar en el que pudiera esconder mi cabeza, para que no viera cuán sonrojada estaba.
-Lamento hacerte esperar tanto pequeña.- se disculpó esta, logrando que me sonrojara aún más.
-Tan pequeña no es.- comentó Jisoo, haciendo que riera. Me sorprendía lo rápido que ella estaba aprendiendo el inglés, sabía perfectamente que no era fácil para ella, pero estaba poniendo todo su esfuerzo al tratar de aprender un idioma extranjero.

ESTÁS LEYENDO
Para siempre, Mi primer gran amor (Lisa y tú) (+18)
FanfictionDe pequeña creía que los cuentos de hadas tenían mucho que ver con la realidad, lástima que cuando aquella etapa culminó y yo fui creciendo, la realidad simplemente me tomó por sorpresa; como si alguien hubiera tenido el atrevimiento de lanzarme un...