Fire & Ice

Capítulo 9: Cita

Antes de que yo llegara al árbol, vi a Lucas sentado allí, con una camisa limpia, al parecer había sido muy rápido en ese asunto, me senté a su lado y saqué unas galletas de mi mochila, empecé a comer tranquilamente.

- Hoy si iremos al cine, ¿Verdad? - Anunció Lucas y casi me atraganto con una galleta, yo planeaba ir al bosque.

- Preferiría quedarme en casa - Luego de una pausa añadí - Podrías preparar tu filete especial.

- Me gusta también esa idea - Ambos sonreímos, pero sabia que mi madre estaría temprano ese día, y la mantendría con nosotros sin importar lo que pasase. No quería quedarme sola con Lucas, no mientras no ordenara mis pensamientos.

Llegamos a casa sin ningún contratiempo, Sam se ofreció a llevar a Anna a su casa y Lucas no mencionó nada comprometedor cuando me llevó a casa, de cierta manera era igual que siempre, lo que me dio un buen grado de alivio.

Recién llegamos encontramos a mi mamá tarareando en la cocina, era la primera vez que hacía eso en mucho tiempo, se me estrujó el corazón, me alegraba que fuera feliz por cualquiera fuera la razón, pero me dolía saber que a pesar de que a través de los años después de la muerte de mi padre, yo había hecho de todo para hacerla sonreír y nada había funcionado, sólo la llegada de Lucas había cambiado su estado de depresión completa.

Lucas me miró como si comprendiera, él me había consolado muchas veces cuando mis intentos por ver a mi madre feliz terminaron en fracaso.

- Te veo muy feliz - Le dije a ella que apenas notaba nuestra presencia.

- Si, algo bueno sucedió hoy. ¿Quieren café?

- No - Lucas la miró extrañamente, al parecer había olvidado, o ignorado el detalle de que Lucas no comía nada.

- Si, claro - Dije recibiendo la taza que ella me ofrecía. Lucas siguió mirándola con el ceño fruncido.

- ¡Ah verdad! Tu no comes nada - Mi madre le dijo a Lucas antes de empezar a reírse - Lo siento, estoy distraída.

- Pareces enamorada - Dije en broma.

- Algo así - Admitió ella seriamente.

Quedé inmóvil por unos segundos, pero luego pensé que a mi padre no le gustaría que ella se quedara sola por el resto de su vida y que estaba bien que ella fuera feliz también. Así que le sonreí desde lo más profundo de mi corazón.

- Tienes que contárnoslo todo - Ella tomó mi mano con una sonrisa agradecida, tal vez ella esperaba otra reacción por mi parte.

- Voy empezando a preparar el filete - Lucas sonrió a mi madre igual de honesto y comenzó a sacar lo necesario.

Siempre que Lucas cocinaba, lo hacia solo, decía que no quería que por casualidad alguien se lastimara y sangrara, para mi eso era ridículo ya que el fue soldado, por ende debía de soportar estar en presencia de mucha sangre, pero preferible prevenir que lamentar, así que lo dejábamos estar.

Yo lo veía asombrada con la rapidez en que se movía, era bastante ágil y cuando creía que algo se iba a caer o a regar, él lo atrapaba y la cocina quedaba casi tan limpia como cuando empezó a cocinar.

Hablé mientras tanto con mi mama de lo sucedido con Anna y con Sam, ella me escuchaba atentamente y de vez en cuando opinaba algo, pude sentir su buen humor, normalmente ella no hablaba tanto conmigo.

Acomodamos la mesa antes de que Lucas sirviera, y luego empezamos a comer, como siempre, el filete de Lucas era exquisito. Él se sentaba a vernos complacido, lo que siempre me pareció un poco triste, ya que él nunca sabría en verdad cuan deliciosa era su comida.