Fire & Ice

Capítulo 15: Historia familiar

- ¿Peter? - El lobo movió la cabeza, podría decirse que pareció un asentimiento.

Él dio un paso hacia mi, e instintivamente di un paso hacia atrás, de nuevo, escuché la voz de Peter, como un susurro bastante claro en mi oído, "Alice, por favor no tengas miedo, jamás te lastimaría", di un respingo por la cercanía de su voz, volví mi mirada hacia atrás casi que esperando que Peter estuviera a mi espalda, y de nuevo, no había nadie. Su voz y, de alguna extraña manera, también su mirada, estaban cargadas de dolor, y de alguna manera con culpa. "Jamás podría temerte, Peter", pensé antes de si quiera decirlo en voz alta.

El lobo, o mejor dicho, Peter, al igual que yo, dio un respingo, me miró fijamente, y luego escuché a Peter con cierta incredulidad en la voz, "Alice, ¿Puedes escucharme?"

Tan asustada y confundida como estaba, asentí con la cabeza y sentí como si él y yo nos contempláramos por una eternidad, al parecer no podía escuchar lo que pensaba, por que nos rondaba el silencio y era de esperarse que después de eso, ambos estuviéramos llenos de pensamientos confusos.

- ¿Cómo es eso posible? - Dije al fin. De ahí en adelante todo lo que escuché de Peter, era en mi cabeza.

- No lo sé - De pronto, él miró hacia el bosque - Averiguaremos eso luego, por ahora será mejor que salgamos de aquí, antes de que llegue toda la manada.

Seguí a Peter lo mejor que pude entre los árboles, iba bastante rápido; por suerte para ambos, no estábamos tan lejos del limite, por lo que el recorrido no fue largo. Caminar con un lobo aún mas alto que yo era, de cierto modo, aterrador, pero sabiendo que era Peter, no se sentía tan mal, sólo era un poco inquietante. Era un animal bastante grande, y su presencia era igual de fuerte a él, casi que sentía cómo el piso temblaba cuando caminaba.

Peter no dijo ni una palabra en todo el recorrido, yo tampoco, lo único que podía pensar era en lo que él pudiera estar pensando, ¿Acaso ya no podría volverlo a ver después de saber eso? Temía esa posibilidad.

Pero ya entendía por qué no había querido decirme la verdad al principio, él no quería asustarme, sólo que eso no iba a suceder nunca; yo estaba totalmente segura, de que a pesar de lo que él pudiera ser, él era el mismo para mi y no por eso dejaba de sentir lo que sentía por él. Y sabía que iba a tener que hacérselo entender.

Antes de salir por completo del bosque, alcancé a ver de lejos a personas caminando, felizmente ignorantes de lo que sucedía en el bosque, Peter frenó justo antes de que pudiera ser visible desde afuera. Peter me miró con sus hermosos ojos azules sin decir absolutamente nada, ¿Por qué sentía que era una despedida? Las lágrimas quisieron venir, pero no, no lo permitiría, no lo dejaría abandonarme tan fácilmente; di un paso hacia él, y él retrocedió.

- Tranquilo, no muerdo -

Escuché una corta risa de Peter, y levanté mi mano a la altura de su hocico

- ¿Puedo? - Pregunté un poco nerviosa.

Él movió su cabeza y mi mano tocó el suave pelaje de la parte superior de su cabeza, lo acaricié con ternura mientras él cerraba los ojos, una señal muy humana, cuando volvió a verme sus ojos aún parecían una tormenta.

- ¿Estás herido? - Pregunté al recordar el golpe que recibió del otro lobo.

- No, estoy bien. Alice, es mejor que vayas a casa.

- No pienso irme sin ti - Afirmé seriamente en voz alta, me daba miedo tratar de pensar para que él me escuchara.

- Alice... - Su voz llena de replica.

- ¿Puedes volverte humano de nuevo? ¿O tienes que esperar la luna llena o algo? - Él volvió a reírse, pero era un poco triste.

- No, puedo hacerlo ahora, pero necesito algo de ropa - Me sonrojé por completo.