15 de Julio.
Dara.
-Nos veremos en tres semanas. -digo con tristeza.
-Serán las tres semanas más largas de mi vida. -deja un beso en mi frente. -Aun no te vas y ya te extraño.
-No seas cursi -. Arrugo la nariz. -Eso me empalaga.
-¡Umta! Nada te gusta.
-Tú sí. -me puse de puntitas para que nuestros labios se unieran, quería seguir el beso hasta que alguien me toco el hombro, me voltee para que mi cara diera con los dulces ojos color miel. Me rodea rápidamente con los brazos.
-¡Me cuidas a mi bebé! -me susurra al oído.
-¿Y tú al mío?
-Si, guapa. -me da un beso en la mejilla.
Dejo que los demás también se despidan, le doy un último beso a Dante y le entregamos nuestros boletos a empleado que está en la puerta de salida. Doy la vuelta y miro a dos de los hombres que quiero demasiado en mi vida y no es que ya no los vuelva a ver, pero si los extrañare.
-¡Vamos Dara! -Mariana me jala de la blusa, les doy un último saludo y ¡Veracruz ahí te voy!
Siento que han sido años en los que no eh ido a Veracruz. Pero en realidad solo ha sido diez meses. EL vuelo de Monterrey a Veracruz es corto, creo que aproximadamente dos horas. Me emociona ver a mi padre en la salida.
Alexei.
Me emociona pasar más tiempo con la familia de Dara, aunque también me cago en que si hago algo mal la riegue. Llegamos al aeropuerto internacional de Veracruz, pero aquí no termina el viaje, en la entrada del aeropuerto nos esperaba el padre de Dara, el señor Raúl, que me agrada mucho y siento que yo también le agrado.
Me da un abrazo con una palmada en la espalda. Subimos a la camioneta, que por suerte si entramos todos.
Y recorrimos un viaje hasta Papantla, Veracruz; Dara me había comentado que la casa de su abuelita no era la gran cosa, que solo constaba de dos cuartos, un baño, una sala, cocina y eso, que antes todo era de barro y lamina, hasta que se decidió que derrumbaran su casa y la hicieran de material, atrás de la casa de su abuelita estaba la de ella que era donde nos quedaríamos.
Yo le había dicho que no me importaba, pero creo que será un reto para mi habitar en una casa pequeña tomando en cuenta que siempre eh tenido cosas grandes, el viaje hasta Papantla se me hace eterno que siento que se duerme mi trasero, comienzo a cabecear hasta que veo casas, pero se me pasa al recordar que la abuelita de Dara vive a las afueras del pueblo casi por Tajín. De algo que no me puedo quejar es que el pueblito colonial es lindo. La neta si quería ir de escala con los chicos, pero eso implicaba pasar más tiempo con Clary cosa que ahorita menos necesito, tengo que aceptar que ella nunca será para mí, que está casada y es feliz. Se que alguien me amara y ese alguien no es ella, en fin, con Clary solo era sexo, salimos un par de veces, pero a ella siempre le intereso el sexo, hubo un punto donde pensé que había sido violado. Pero no, porque yo fui quien lo empezó todo y ella fue quien lo termino.
-¡Llegamos! -anuncia el padre de Dara estacionándose enfrente de una casa con un patio gigante, había mucha gente presente, tanto chicos como grandes.
-¡Es Dara y Mariana! -anuncia una señora gordita morena, un grupo de adolescentes surgen de la pequeña casa que hay, detrás de esa hay una de dos pisos con un gran balcón.
-Mi familia materna. -me hace saber Dara, me quito los anteojos para no parecer mamon, veo algunos gestos de las mujeres y hombres. Que puedo decir soy todo un galán.
ESTÁS LEYENDO
Polvo de Estrellas || Completa Y En Corrección||
Romance[Libro 1] "Él la miró, sabiendo con certeza que se estaba enamorando. Él la acercó y a beso bajo una manta de estrellas, preguntándose cómo demonios había tenido la suerte de encontrarla" Dara es una chica que un día como cualquier otro conoce a Dan...