Le dedico el capitulo a KarennnCT
Espero y lo disfruten.
(....)
Tú versión.
Para cuando la puerta se volvió a cerrar tras de él ya lo estaba lamentando. En verdad Mario se estaba yendo y yo lo dejaba ir.
Corrí hasta la ventana, por donde vi a Mario subir a su auto. Un minuto más y desapareció. Y otra vez me quedaba sola.
Me pegué contra espaldas a la pared y me deslice por ésta hasta que mi trasero tocó el piso. Cuando lo hice me golpeé fuertemente el codo con una mesita de madera que estaba a un lado de mí, pero me importo poco, era más el dolor que sentía en mi pecho como para preocuparme por un moretón en mi brazo.
El sentimiento de vacío que me dejaba arrastró las lágrimas consigo, y lloré y lloré… tanto como mis ojos pudieron. No tenía sentido estar llorando de esta manera cuando fui yo quien provoco todo esto, es ilógico tratar de culparlo a él por mi sufrimiento. Sabía que lloraba porque me sentía culpable, porque amo a Mario con todo mi corazón y odio verle sufrir.
Entonces pensé en que ni siquiera pregunté donde se quedaría... ¿irá a casa con Gloria?... prefería que no. No quería volver a mezclar a su mamá en nuestros problemas, pero estaba consciente que si yo decidía terminar definitivamente con Mario sería historia de nunca acabar con mi madre y Gloria.
Hmm, mi madre especialmente.
La dura pared entre la realidad y lo que yo creía que era una pesadilla o una película de terror estaba desapareciendo cuando por lo lejos escuché mi celular sonar. No era ningún rigtone en específico, lo que significaba que tampoco era una persona en especial, así que lo deje sonar. Se calló y volvió a sonar.
A gatas me arrastre hasta el sillón donde estaba mi celular y lo tomé. Era un número desconocido.
Me limpié la cara con el cuello de mi camisa y me aclaré la garganta.
-¿Si? –dije al atender. Mi tono de voz sonó mas ronco de lo que pensé.
-¿Señorita (tuapellido)?
-Ella habla –respondí secamente.
-Hola, ______. Habla Helen, del departamento de recursos Humanos. ¿Te acuerdas de mí? –Mierda. Helen, lo había olvidado. Y estaba tan emocionada de recibir su llamada, no pudo haber llamado en peor momento.
-Claro, Helen. ¿Todo bien? –traté de sonar un poco más emocionada. La escuché sonreír.
-De maravilla. Tengo noticias para ti, tienes el empleo, ¡felicidades!
¡Dios mío! ¿Tengo el trabajo?... ¡Lo tengo! Lo logré. Woau. La semana anterior había ido a una entrevista de trabajo en una nueva empresa de telecomunicaciones en México, era el lugar perfecto para comenzar. Me había graduado como Lic. En Administración, en la universidad sabatina en menos de cuatro años, y ahora estaba dispuesta a buscar un empleo. El trabajo en la empresa era sencillo, sería una asistente más de algún otro puesto importante. Mario estuviera tan orgulloso de mí si le diera esta noticia… Ow, Mario.
¡Su trabajo! En este momento, después de una tormenta, recordé que Mario había pedido el día de hoy para no ir a trabajar, sólo para llevar a Kim a su primer día de segundo año de preescolar. Oh, Dios, ¡Kimberly! ¿Qué hora era? Eche un vistazo al reloj en la pared: 11:50. La hora de salida de Kim era a las 12:00. ¿Qué clase de madre olvida que tiene que pasar por su hija al Kinder?
Con toda mi mierda lo olvidé.
-¿________? –insistió Helen al teléfono, haciéndome volver a la tierra.
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"Beautiful Lies." - Mario Bautista & Tu
Fanfiction''Tiene que haber alguna forma para hacer que me quieras como antes''.