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En conclusión, Ángela pasó la prueba de Marian Boone.

─ No está mal.

La señora Marian lo había dicho mientras observaba a Ángela beber el té.

Naturalmente me quité del lado de Ángela, y pensé en lo que había pasado ayer por la tarde.

Seis horas, pensé, era lo había estado mirando el rostro a Ángela.

Había pasado todo el día comprando, pero me sentía más cansada que antes.

Tuve que practicar con Ángela, quien se quejaba de que le dolía el brazo e insistía en querer conocer al segundo príncipe.

Más tarde, pensé que bien podría haber renunciado.

Fue un entrenamiento de varias horas. En comparación con la Ángela de mi vida anterior, ha habido una gran mejora.

Pero no estaba segura de sí le gustaría a la Sra. Marian.

Todavía no estaba tan lejos como decir que era "perfecto" como lo había dicho la Sr. Marian, pero desde que me uní y le regara, le había dado permiso.

De hecho, fue ayer y hoy que sentí esos días muy largos.

Dejé a Ángela con una sonrisa feliz y volví a mi habitación. Necesitaba algo de tiempo para descansar solo hasta la noche.

Llegó el día de la Fiesta del té de Louise.

Un carruaje esperaba en la puerta principal de la casa Belchester.

Era la hora de la cita, pero Ángela no llegaba según lo acordado.

Era una conclusión inevitable. La causa era una lesión menor en el tobillo, y era posible que quisiera un pastel para mañana.

─Lo siento, señorita Ángela, con una leve lesión en el tobillo, no creo que pueda ir de inmediato. La señorita Jaina me pidió que le dijera que se iría primero.

Otra diferencia es que la criada que vino a pronunciar las palabras a Ángela, ya no era Rhona, si no Ellie.

─ ¿De verdad? ¿Ángela está bien?

─No es una gran lesión. Me dijo que sería mejor que tomar un descanso la mejoraría.

─Me alegro. Entonces iré a la casa de Louise primero, y si se siente mejor, ¿le dirás que venga?

─Sí, entiendo.

Me di la vuelta sin dudar y subí al carruaje.

En el pasado, había estado preocupada por Ángela que había corrido a su habitación para averiguar que le había sucedido.

Sé que eso es un engaño en este momento, pero, por supuesto, incluso si realmente le doliera no iría a preguntarle cómo estaba.

Mientras me sentaba sobre el gran asiento espacioso el carruaje comenzó a moverse lentamente, dejándonos a Anna y a mí solas en el interior.

Anna, sentada frente a mí, se aseguró de que mi vestido no estuviera arrugado.

El vestido de hoy es uno doble que se superpone en dos piezas, y había sido hecho por la diseñadora Ceila la temporada pasada.

La alta saturación y el vestido azul claro se llevaba debajo del vestido, por lo que se puede usar solo ahí.

En la parte exterior, llevaba un vestido con encaje, el color general y el diseño tenía algunos lazos.

Ceila dijo que el vestido era "práctico" y podía dar el efecto de estar usando dos en lugar de uno, por ello su precio era más caro que comprar dos vestidos normales.