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— ¿Es usted su alteza Essila?

— ¿Por qué está su alteza real en un lugar como este?— Voces de asombro estallaron por todo el lugar. Sin embargo, cuando el escolta real los miró, la gente se calló como si los hubieran condenado, y la clínica quedó en silencio nuevamente. Una mujer de marrón, criada de Essila, agarró el abrigo de Basil.

— Ya envié a alguien al palacio imperial, así que, ¿pueden darme primeros auxilios hasta que llegue el palacio?

— Hey, esto es realmente una locura, ¿Su Alteza ...?

Basil era un aristócrata humilde, pero la orden de tratar a un miembro de la familia real fue demasiado repentina. Basil se sintió abrumado y sus manos temblaron violentamente.

— Parece que has tenido algo así como un grado de veneno, ¿qué demonios pasó?

— No lo sé. Lo único que ha comido es el fruto Nasu, y de repente entró en ese estado— La cara de la mujer estaba cubierta en lágrimas.

Ángela que estaba a mi lado, dejó escapar una pequeña risilla. Fue un sonido tan pequeño que fui la única en escucharla. Ángela tenía la cabeza baja, pero estaba construyendo algo enervante en su despeinada cabellera. Después de un tiempo, sin embargo, levantó la cabeza y solo sintió amargura.

— Creo que puedo curar a la princesa— Dijo Ángela y dio un paso al frente.

Pero el caballero se interpuso.

— ¿Eres terapeuta?

— Si, lo soy.

El escolta la miró con recelo,incluso después de escuchar la gran respuesta de Ángela.

— Lo siento, pero la Lady no parece una terapeuta.— ¡No! ¡La señorita Ángela es un terapeuta brillante y capaz!— Un poco lejos, Sella les gritó como si estuviese defendiendo a Ángela.

— No lleva mucho tiempo, pero tiene mucho talento, por lo que le dicen el Ángel de las calles de Arlen.

— ¡El Ángel de las calles de Arlen!¡He oído los rumores que circulan!— La criada se apresuró a hablar con el caballero de uniforme negro.

— Dijeron que tenía grandes habilidades médicas. Simplemente tomemoslo como una emergencia temporal, ¿Qué piensas?

— ¿Estás loca? Dejar a su alteza real,¿¡a una mujer tan joven!?

— Pero ese hombre de allá está en malas condiciones─ La criada señaló a Basil.

Todavía pálido, Basil se veía tan enfermo como Essila acostada allí. Pero no había nada de qué culparle. Si hubiera un error en el tratamiento de un miembro de la familia real, sería duramente castigado.

«De repente me encontré con la familia real en una situación a la que mi corazón no estaba preparado ¿Cómo puedo mantener la paz? »

— ¡No tengo tiempo para esto!— Ángela se interpuso entre las dos personas que discutían y se acercó a la Emperatriz.— Sé que sospechas de mí, pero creo que es mejor tratarla ahora.

— Si alguien que carece de cualidad usa el hilo dental y dice: "Estás equivocado", entonces, no puede prometer nada. Así que si no tienes confianza, será mejor que no te salgas de tu juicio.

—Tengo seguridad de que si la dejamos estar, ella podría morir.

Essila seguía temblando.

El caballero llevó su mano a la espada con ira ante las palabras de Ángela.