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Final de la historia.

Estoy muy feliz y me faltan muchos gracias, gracias por leer y apoyarme con está historia, esperó que sigamos juntos, yo escribiendo para ustedes y ustedes leyendome.

Gracias.





Tine se encontraba ahí, llorando en los brazos de su novio, no podía controlarse él mismo púes comenzaba a recordar toda su niñez y otros momentos.

—No se por que soy tan infeliz, debí de ser horrible en mi vida pasada...

Sarawat negó y le abrazo un poco más fuerte.

—No, no, no creas eso, todos tenemos problemas, creeme que los resolverás, deja de lamentarte por favor, haces que también quiera llorar... No me gusta verte así.

—Perdón...

—No... No te disculpes, no has hecho nada.

Tine se aferró al cuerpo del otro chico, limpiándose las lágrimas y nariz en la ropa de su novio, al otro no le importaba.

Le dio leves palmadas en la espalda y comenzó hablando bajito.

—Tine...

—¿S-sí?—Sorbió su nariz—

—¿Por qué no intentas ir hablar con tu familia?

Tine se quedó pensando, sin decir alguna palabra o siquiera moverse.

Hablar con su familia sonaba como un suicidio.

Pero no debía ser un cobarde.

—Seguro me tienen odiado, no quiero verlos...

Murmuró por lo bajo hundiendo su cabeza en el cuerpo del otro.

—No recuerdo haber sido novio de un Tine cobarde y llorón, yo recuerdo a Tine alegré, tímido y que podía enfrentar sus miedos.

Tine tan solo le miró, comenzó asentir.

—Si tu estás sufriendo yo también lo hago.

Tine le miró fijamente.

—Tine, la oscuridad puede convertirse en luz en menos de un segundo. No tengas miedo de ir...


















Sarawat le dijo a su chofer que llevará a Tine a su hogar, no era muy lejano, Tine y Sarawat se despidieron con un abrazo, después de todo Tine vio conveniente ir a casa de nuevo, no podía quedarse allí toda la vida.

"No soy un cobarde" 

Se dijo él mismo antes de subir al auto.

—Nos vemos después Tine, cuidate.

Le dijo Sarawat sonriendole levemente, los dos se miraban a los ojos, Tine igual sonrió y asintió.

—Gracias por todo, Sarawat.
—No tienes que agradecerme.

El auto comenzó a moverse, Tine le dijo la dirección al chofer y comenzaron.

Mientras miraba como la figura de Sarawat cada vez se hacía más borrosa volteó a ver los demás autos, personas y casas que estaban cerca de ellos, todo lo que se podía ver al alcancé. Ver a dos chicos juntos jugando, uno mayor que él otro, le hacía recordar cuando su hermano y él solían jugar todo el tiempo.




—¡Type, Type, Type! ¡Ayuda!

Él pequeño de once años corría por toda la casa en busca de su hermano mayor para que le ayudará, hasta que le encontró, chocó con las piernas del mayor y cayó de senton.

Crayola (SarawatTine)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora