Omega abandonado

33

Stephen llegó un poco agitado a la habitación del omega. Tony lo miró extrañado.

- ¿ha pasado algo? - preguntó el omega al ver al hechicero así. - No te ví ni a ti ni a Harley en toda la mañana.

El hechicero suspiró y se sentó en la cama del omega.

-Tus cachorros pelearon. - Tony alzó una ceja y  miró hacia la cuna por inercia. El hechicero puso los ojos en blanco. - Tus cachorros mayores se pelearon.

- Ohh - Pareció entender. - No son mis cachorros.

-Como decía, se pelearon, o más bien discutieron.  - Stephen ignoró el último comentario del omega.

Luego de unos segundos. Tony pareció caer en cuenta. 

-Espera. ¡¿Peter y Harley discutieron?!

-La verdad siempre pensé que ese día llegaría algún día. - Stephen miro al techo como si estuviera reflexionando. -  Fue hoy.

-¿algo relevante para contar?

- Al parecer Peter encontró a Harley fumando. 

- Oh,-  Tony parpadeo varias veces. Él sabía lo enserio que se estaba poniendo Peter con la salud de Harley desde el incidente de la última vez - eso es grave. - Stephen asintió 

- Lo es, discutieron y al parecer llegó a gritos y algunos empujones. Friday me avisó antes de que fuera más grave.

- ¿Dónde están los chicos?

- Mandé a Peter a su casa, fue un poco complicado ya que parecía no quererse ir. Y bueno Harley se encerró en su habitación.

- Grave...- Murmuró el omega al caer en cuenta la situación; después de todo aquellos dos a pesar de lo opuesto que eran, parecían llevarse bastante bien. Siempre que hablaban había una especie de complicidad entre ambos.

- Si supongo, le dije que Peter que se calmara un poco, y que volviera cuando se sintiera más tranquilo. También le dije que se tomara un tiempo y que no debía que estar tan pendiente de la manada 24/7

- Sabes que es algo imposible de pedir. Es el líder, aunque no lo quisiera es como si fuera una necesidad.

El hechicero asintió.

- Lo sé muy bien, Tony. Pero aun así  es un niño. Lo aceptamos porque te ayuda Tony, pero el mismo sabe que no tiene que hacer todo lo que el alfa líder hace. No por ahora.

- Sus instintos son más fuerte, Stephen... - Suspiró.

-

Tony hizo algo que no había hecho desde hace semanas. Salir de su habitación. Si, sonará triste y eso, pero desde el nacimiento de sus bebes no había salido de allí. Tenia miedo. Se escuchará  estúpido sabiendo que estaba en su propio complejo, pero incluso en su propio lugar no podía sentirse seguro,  no después de lo que paso con el ese hombre. De solo recordarlo podía sentir su cuerpo estremecerse. Realmente ya no se sentía seguro en ninguna parte. 

De todos modos no iría muy lejos. Solo a la habitación de Harley. Había dejado a Rhodey con los bebes.  Quedaba a tres puerta de la suya, curiosamente al lado de la antigua habitación de Wanda. Tocó tres veces.

- Mocoso ¿estas allí? Espero que  no te estés masturbando. Porque quiero entrar.

Escuchó la cama moverse un poco. - Esta abierta. - Esas dos palabras sonaron como si fuera hecho un gran esfuerzo para hacerlo. Al entrar una ola de feromonas lo golpearon tan de golpe que tuvo que taparse la nariz.