Omega abandonado

27

Si, sucedió demasiado rápido.

Bonita mañana, bonito día de lo que parecia ser un espectacular sábado. Ese día era su día predilecto porque atraparian al duende verde, oh para lo que le fue una gran y desagradable sorpresa. Al señor Osborn.  

Jamás se imaginó que uno de los hombres que había admirado, era alguien tan peligroso. Ahora tenia sentido aquel día que él le dijo que se apartara de los vengadores. No se lo decia como el duende verde a spiderman, se lo decia como Norman Obsorn a Peter Parker.  Pero eso ya no importaba ahora.

Se suponía que todo seria sencillo, ir  a donde el hombre se ocultaba cuando al parecer no era dueño de una importante compañía bioquímica, y arrestarlo  junto a todos los demas. Si, eran 3 contra practicamente todo un ejército de bandidos. Pero el señor Stark les habia dado acceso para decodificar a la legión de hierro por si las cosas se ponian feas.

Y se pusieron feas, muy feas y lo peor es que no tuvieron que ocupar a la legión es consecuencia.

Todo habia sido una trampa y el señor Osborn/duende verde era el cebo, una vil distracción, para que todo el ejercito de bandidos no estuviera y fuera ni más ni menos a la fiesta donde se encontraba el señor Stark . Cuando se dieron cuenta de sus intenciones era muy tarde, después de todo estaban muy lejos de ese lugar y no llegarian a tiempo para evitar un desastre. Aún asi lo intentaron. No antes de golpear a Osborn en toda la cara por estarse riendo de la situacion.

Intentaron llamarlos pero el señor Stark tenia el teléfono apagado, y hablar con la señorita Pepper para avisarles, solo resultó en una gran interferencia.   A los tres no les quedo de otra que rezar y llegar mas rápido. 

Lo cual todo fue en vano, porque el lugar ya era un completo caos.  Olía a muerte, sangre y destruccion. Y con ese pensamiento urgando en la mente de todos, corrieron, en el camino encontrandose con el señor Stephen. 

Todos desesperados, todos  angustiados. y su teleftono no paraba de vibrar.

Tuvieron que deshacerse de muchos para abrirse paso. y todo la escena que vieron al llegar los dejor paralizados, asustados, inquietos, aterrados o cualquier sinonimo de miedo y perder a un ser querido al mismo tiempo.

Su omega líder lloraba desconsolado sobre lo que esperaban fuera el cuerpo aún con vida de Pepper Potts, aunque las abundante cantidad de sangre no los tranquilizaba de ninguna manera. A su alrededor Natasha mantenía alejados a aquellos criminales, dando todo de si, mientras sacaba algún que otro truco o arma de su vestido rasgado.

Fue el primero en acercarse, Stephen venia atras de él mientras que los demas ayudaban en el lugar. Le dió una breve mirada de agradecimiento a la alfa, y ella solo asintió.

¿Recuerdan que las personas siempre tienen un nudo en la garganta cuando algo malo pasa? bueno él sentía una gran pelota queriéndolo ahogar.

Tuvo que agarrar a la señorita Pepper porque Tony no la queria soltar entre llantos y sollozos, y solo cuando la tuvo en sus brazos se dio cuenta del charco que habia entre las piernas del omega.

Habia roto fuente y ni siquiera se había dado cuenta.

Le aviso al señor Stephen y este rapidamente lo acogio en brazos haciendo un portal directamente al hospital.
Cada paso que daba el se estremecía de una manera no muy agradable, después de todo sus dedos inevitablemente se clavaban en la carne expuesta de la espalda de beta.

Se lo llevaron, entre tanto el nombre de la señorita Pepper salia de sus labios como un lastimero sollozo.

Sentado en la sala de espera junto a los demás, sentía un gran vació, y sabia que el resto también, sus rostro no pasaban de otra emoción que no fuera angustia, preocupación o miedo.