Chris Evans

4.3K 147 51
                                    

1/2

El día estaba en su mejor punto, con un hermoso cielo color azul, sin una sola nube que cubriera tan hermosa obra de arte. El sol estaba ya en suposición habitual.

Un día que prometía mucho, y la pareja estaba por salir a dar un paseo, después de unos largos meses de estar separados, finalmente saldrían un poco para disfrutar de su tiempo juntos. Eso era lo que ambos necesitaban, solo estar juntos.

─Nena, ¿estás lista? -le preguntó el rubio a la hermosa novia que tenía- Te ves... preciosa. -comentó al ver lo bien que se miraba-

Ella tenía puesto un pantalón pegado negro, con unas botas cortas del mismo color, una blusa de manga larga de igual manera de color negro, y para terminar un abrigo color café. O algo parecido. Ella al verlo se quedó sin palabras, se acercó a él, lo abrazó redeando su cuello con sus manos, para susurrar a su oído "te ves tan sensual vestido así"

Pues el Bostoniano estaba vestido con unos pantalones simples negros, unos zapatos del mismo color, pero en la parte superior se había colocado un sueter de lana color blanco.

Pues el Bostoniano estaba vestido con unos pantalones simples negros, unos zapatos del mismo color, pero en la parte superior se había colocado un sueter de lana color blanco

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

─Mientras tú estés a mi lado yo siempre estaré lista. -se puso de puntitas para poder unir sus labios con los del actor-

Chris dejó que su novia saliera primero, cerró la puerta de su casa con seguro, y tomados fr las manos comenzaron su caminata. Admiraban el bello color rojizo que tenían las hojas de los árboles. Daban un toque mágico al lugar.

─¿En qué estás pensando, preciosa? -ella volteó su mirada al rubio, y no pudo contener un suspiro de enamoramiento con solo verlo-

─En lo afortunada que soy por tenerte a mi lado, Chris. -Evans volvió a unit sus labios, solo que no duró mucho tiempo-

Caminaban sin rumbo fijo, hasta que llegaron a un parque pequeño, era hermoso, el pasto verde estaba lindo, y sobre éste habían cientos de miles de hojas, todas ellas de colores rojizos o dorados, dándole un aspecto romántico al lugar.

─Hubieramos traido a Dodger, sabes que le encanta jugar en las hojas. -mencionó la pelinegra mientras camiban tomados de la mano por aquél lugar-

─Lo sé, nena, lo sé. Solo que quería tener un momento contigo. Te quería tener solamente para mí durante unos minutos.

─Vaya, me saliste egoísta. -ambos soltaron una risa-

Dejó de caminar, para después halar la mano de su compañera, ella rió al sentir el accionar del masculino, pero sin titubear se dejó llevar por lo que él hacía. La abrazó contra su cuerpo, unieron sus labios de una manera más demandante, aspiraban el dulce aroma que el otro dejaba escapar.

Siguieron caminando un rato, estuvieron jugando con las hojas. Se estaban divirtiendo como si fueran unos niños pequeños. Se dejaron caer al suelo, comenzaron a besarse, al fin de todo, estaban solos aquel día. Al separarse, Chris se quedó mirando el bello rostro de su novia, y ella se sonrojo al sentir la mirada de su chico sobre ella. Evans volteó su vista para unos arbustos que estaban no tan lejos de ellos, su rostro se puso serio, eso provocó que la pelinegra le surgieran dudas.

One Shots. (Steve Rogers/ Chris Evans)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora