Los niños corrian vueltos locos por la casa, gritando, jugando y divirtiéndose. Los mayores Evans estaban acostados, pero despertaron por los brincos que sus gemelos estaban saltando en la cama.
─¡Mamá, Papá. Despierten! -gritaba la pequeña rubia de ojos azules-
─¡Hoy es Navidad! -le siguió su hermano gemelo-
Chris largó una carcajada al escuchar las voces de sus hijos. ________ despertó algo alterada, pero al ver que eran sus hijos los que causaban tanto alboroto se relajó inmediatamente. Una enorme sonrisa se expandió por todo su rostro. Amaba ver a sus pequeños así de felices.
─Hey, pequeños. -les dijo Evans- ¿Ya vieron lo que les dejó Santa Claus? -la cara les brillaba de lo emocionados que estaban-
Los adultos se levantaron y abrazaron a sus hijos.
─Okey, Lia y Liam, dejen que papá y yo nos cambiemos y enseguida bajamos con ustedes, ¿okey? -los gemelos aplaudieron con gran emoción mientras afirmaban con la cabeza-
Bajaron de la cama a tropezones y corrieron empujandose entre risas.
─Tengan cuidado y no vayan a bajar sin nosotros. -les gritó _______. La castaña se volteó y quedó maravillada con el hermoso rostro de su esposo-
─Buenos días, cariño. -le besó los labios-
─Buenos días a ti. -le regresó en beso. Ambos se sonrieron-
Pero el momento se fue al escuchar los gritos entusiasmados de sus hijos. Ellos rieron por lo de bajo, se levantaron de su cama y fueron a encontrar a sus hijos.
─¿Están listos? -les dijo Chris- Andando.
Los niños bajaron corriendo las escaleras, mientras que los adultos los seguían muy contentos, pues ver a sus pequeños así de felices ellos eran muy felices también.
Los gemelos se detuvieron al que de la escalera, su boca se abrió al ver tantos regalos en el suelo, junto a lo que parecían ser huellas.
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─¡¡MAMÁ, PAPÁ. SANTA SI LLEGÓ!! -gritaron ambos al mismo tiempo-
─Vaya, pero que emoción. Veamos que les ha traido este año.
Los pequeños fueron a toda prisa para quitar la envoltura de los regalos, habían recibido la mayoría de los juguetes que habían pedido. ________ los dejó para ir a la cocina y preparar un poco de chocolate caliente para todos. Estaba ya colocando el sabroso líquido en las tazas decoradas con renos, pinos, galletas, también colocaba pequeños bombones.
Sintió unas manos en su cintura, sonrió al sentir unos besos en su cuello.
─¿No hay regalo para mí? -le susurró en el oído a su esposa-
─¿Te portaste bien este año? -se dio la vuelta, y enrollo sus manos atrás del cuello del actor, el seguía con sus manos en la cintura de su mujer. Hizo una mueca, como si estuviera pensando en todo lo que hizo en el año-
─Claro, yo siempre me porto bien. Así que merezco un regalo. -se inclinó hasta rozar la punta de su nariz con el cuello de la castaña-
La mayor parte de esa mañana, la familia Evans se dedicó a pasar un rato en su pequeña gran familia. Seguido de eso; más tarde, visitaron a las familias. Primero fueron a visitar a la familia del actor, Lisa, Scott, Shana y Carly, junto con los hijos, estaban reunidos. Estuvieron con ellos toda la tarde. Se fueron antes de que la noche tomara su turno, para ir a la casa del padre de Chris. Lia y Liam, los pequeños gemelos estaban tan emocionados de pasar un rato con su abuelo.
En la noche, para finalizar su largo día, fueron a la casa de la familia de los Williams. Cenaron alegremente, mientras compartían risas entre todos en la familia. Los padres de ______ esperaban pacientemente su llegada, pues al ser si única hija, lo que más querían era pasar ese día junto a ella, su esposo, y sus adorables nietos. Los padres de la castaña le regalaron todavía más juguetes a los gemelos. Estaban todos felices, y todos estaban tan armoniosos entre si.
Se fueron del lugar cerca de las tres de la madrugada. Los pequeños rubios ya se estaban quedando dormidos, el día fue realmente agotador, pero sobre todo, fue muy divertido. Al llegar a su casa, Chris cargó en brazos a su hijo varón, mientras que la chica cargaba a su hija. Entraron sin hacer un escandalo en el hogar. Subieron cuidadosamente las escaleras y llevaron a los gemelos a su habitación.
Lia despertó, bajó de los brazos de su madre para poder ir al baño a colocarse la pijama. Su hermano Liam, despertó justo unos minutos después que ella. Chris se recargo en el pórtico, admirando a su bella esposa, junto con sus muy queridos primogenitos. Una vez que los gemelos estuvieron listos, _________ los acomodó en la cama. Los arropó muy bien, prendió aquella lámpara de noche, misma que al instante de ser prendida, dejaba ver las constelaciones en el techo, con cuidado de no hacer mucho ruido, se acercó hasta su esposo.
Chris abrazó a su esposa, vio por detrás de ella, volvió su mirada a la castaña que tenía en sus brazos, para poder juntar sus labios. Ambos salieron de la habitación, asegurándose de apagar la luz, y cerrando la puerta.
─Hay algo que quiero darte. -le dijo el rubio-
─¿Y qué es? -le preguntó de forma no tan inocente. Chris sonrió, besó una vez más los labios de su amada-
La tomó de la mano y la guió escaleras a bajo. Siguieron su camino para terminar en el despacho de Chris. ________ lo miraba curiosa, no tenía idea de que era lo que su esposo tenía en mente.
─Ven. -la guió hasta el piano que había en el lugar. La hizo sentarse, y en seguida él tomó asiento- No encontré nada que regalarte, al menos no algo físico. Estuve varías semanas pensando en que sería bueno... en que sería algo digno de ti. -la castaña se sonrojo- Y finalmente se me ocurrió una idea. Está es tú canción, yo la escribí para ti, cariño.
Acto seguido, Evans comenzó a tocar el piano, era una melodía tranquila, reflejaba amor, sensualidad, tranquilidad. Una canción que encajaba perfectamente. _________ tenía los ojos llenos de lágrimas. Chris estaba tocando con sentimiento, de vez en cuando volteaba a ver a su esposa y le daba una bella sonrisa, misma que era capaz de derretir a la bella femenina que tenía frente a él.
Pasaron al menos tres minutos, cuando la melodía dejó de sonar. Se dió la vuelta para ver a su esposa en un mejor ángulo. Sonrió al ver su expresión.
─¿Y bien?
─Oh, amor. Es el mejor regalo que alguien me pudo dar. -y se lanzó a los brazos del varón, alzó sus labios para encontrarse con los de Chris-
Y así fue como habían terminado ese día. No había una mejor manera que pasar Navidad que no fuera juntos.
