El paraíso, envuelto en magia y sueños colmados de bondad, despierta como ráfagas de luces incandescentes que iluminan una felicidad despiadada y feroz. En el interior de la Reina Artemisa, la esperanza brota del pecho con la intensidad de una supernova, dispuesta a estallar. Sin embargo, su destino, marcado por cicatrices que nunca sanaron, se convierte en un aliado traicionero. El peso de sus errores y la indecisión que alguna vez la dominaron ahora rozan con una obsesión destructiva que amenaza con consumirla. Artemisa, un ser de luz en busca de redención y del amor que una vez conoció, se ve atrapada en el tormento del Rey Damien, el despiadado soberano del infierno. Damien es un ser sin escrúpulos, temido por los mortales e implacable con los impuros. Su propósito es someter a Artemisa, quebrantar su voluntad hasta transformarla en una figura obediente y sumisa. Solo así logrará su ambición de gobernar ambos reinos, usando el amor como un arma y las mentiras como su herramienta. La tragedia de su relación es un reflejo de la eterna lucha entre el bien y el mal, entre la luz y la oscuridad. ¿Puede el amor salvar a un pecador, o es el villano quien redime al santo? Tal vez nunca lo sabremos, pero... ¿no estaba prohibida su conexión desde el principio?