Capítulo 45

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Cambié la foto de Raquel. Ya no es la actriz que habían visto anteriormente. Puse a otra actriz, es que no me recordaba del nombre de la anterior y pues la cambié xD _______________________________________

Irina

Los rayos del sol alumbraban la habitación. Me levanté poco a poco encontrandome con el cuerpo desnudo de Fabián. Sonreí al recordar lo sucedido. Me di cuenta que aún seguía desnuda, así que me levanté suavemente para no levantarlo, busqué una toalla y entré al baño.

Entré y abrí la llave para que saliera el agua. Di un pequeño brinco, el agua estaba helada. Poco a poco iba calentandose. Luego de mi baño, puse la toalla en mi cuerpo y salí. Cuando salí vi que Fabián estaba sentado en una esquina de la cama en boxers.

-Buenos días hermosa.- sonrió al verme.

Corrí hacia sus brazos y lo besé.

-Mmm, hueles delicioso. ¿Porqué no me esperastes? Nos hubiéramos bañado juntos.- sonrió.

-Lo siento, no quería levantarte.- dije acariciando su pecho.

-¿Porqué no te quitas esto?-preguntó señalando la toalla.

-¿Disculpa mesero?- pregunté haciéndome la ofendida.

-¿Comenzamos con el apodo mesero? Bueno, entonces el mesero no podrá hacerte el amor de nuevo.- dijo pensativo.

Sonreí y me levanté. Me puse delante de él e hice que la toalla se cayera "por accidente". Fabián me miraba atento. Luego de unos segundos me di cuenta de su erección. No aguanté más y me trepé encima de él. Quiero que me haga suya otra vez. Anoche hicimos el amor, lo sé. Con los hombres que e tenido sexo solo sentía placer. Con Fabián obviamente siento placer, pero a la misma vez una sensación hermosa, acompañado con unas cosquillas que no tienen explicación.

Comenzamos a besarnos lentamente mientras el bajaba sus manos por toda mi espalda llegando a mi trasero. Me volteó y acarició mi mejilla dejándome ver el tatuaje en su muñeca, todo esto parece un sueño.

Cuando Fabián estaba a punto de bajar sus boxers, tocaron la puerta. ¡Mierda! ¿Quién rayos será?

Fabián me miró y buscó la toalla rápidamente.

-Ten, cubrete. No te asomes, no quiero que nadie te vea así.- dijo serio.

Celoso, sí, es un celoso.

Sonreí y asentí. Coloqué la toalla en mi cuerpo y me senté en la cama. Fabián abrió, pero no había nadie. Miró para todos lados, cuando miró al suelo había una carta.

-¿Qué pasa?-pregunté.

-No lo sé, dejaron esto.- dijo señalando la carta.

Fabián se acercó a mí y luego se sentó a mi lado. Abrió la carta y comenzó a leer.

¿Y si la persona que amas, no es quien dice ser? xx

Miré a Fabián asustada. ¿Porqué alguien escribiría eso? Estamos en New York, nadie nos conoce aquí.

-Fabián ¿Qué significa eso?- pregunté.

Se quedó serio y pensativo por algunos minutos, creo que me causó un poco de miedo.

-No lo sé Irina. No tengas miedo, siempre estaré a tu lado pequeña.- dijo y me dio un tierno beso en la frente.

-Bueno, ya es hora de ir al psicólogo. Me bañaré mientras te vistes.-dijo levantándose de la cama, pero lo detuve.

-Fabián, ¿No crees que es absurdo volver?- pregunté.

Fabián hizo un gesto de confusión.

-Verás, tú querías que cambiara y que amara de verdad ¿Cierto?- el asintió. -Pues bueno, sé que te amo. Y no quiero estar con nadie más, solo contigo. Nunca necesité un médico, ni nada por el estilo, te necesitaba a ti.- dije acariciando su cabello todo despeinado.

Fabián sonrió y me besó.

-No puedo creer que la Irina rebelde, cínica y la cual no le importaba nada, esté hablando de esa manera.- sonrió.

-Jamás pensé que iba a enamorarme. Y mucho menos del meserito idiota que conocí hace algunos meses.- sonreí.

-Créeme, tú tampoco fuiste algo fácil.- besó mis labios y entró al baño.

Me acosté en la cama a esperarlo. Voltié la cabeza y volví a encontrar la nota. La abrí nuevamente.

¿Y si la persona que amas no es quien dice ser? xx

Por Dios, quién estará haciendo éste jueguito. No le encuentro sentido a nada de esto.

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-¡No! ¡Sueltame, por favor!- dije entre risas.

Fabián me estaba haciendo cosquillas y juro que ¡casi no puedo respirar!

-Pues di que me amas y te dejo en paz.- dijo haciéndome cosquillas.

-T-te a-te amo Fabián. Y-ya lo dije sueltame.- dije y al fin me soltó.

Le tiré una almohada y comenzamos a reír. Todo esto parecía un sueño, pero no sé si despierte o solo me quede dormida por el resto de mi vida.

-Irina, creo que comenzamos mal. Hicimos el amor, pero aún no te e hecho la pregunta correcta.- dijo y yo me tensé.

-¿Quieres ser mi novia Irina Mackenzie?-

Por Dios, sentí tantas cosas en tan poco tiempo.

-Sí Fabián, quiero ser tu novia. - los dos sonreimos y nos quedamos en un hermoso y delicioso beso.

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Es corto, no me maten xD

*Todas ustedes me ignoran y voy a llorar :'(*

Estoy creando un grupo de Whatsapp para las lectoras de la novela. Interesadas envíen sus números por mensaje. Ahí podremos hablar de la novela, de sus preguntas, de lo que les gusta y lo que no y de mucho más.

Las amo y gracias por el apoyo.

El sexy de Fabián en multimedia.
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Besos xx

También existen chicas malas |EDITANDO|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora