Capítulo 23

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Irina

Estos días han sido tan extraños. El mesero me mira como si quisiera comerme. Tom me llama más de lo normal. No he sabido más de la mujer que me trajo al mundo. Porque sinceramente a eso no se le llama madre. ¿Saben? Mientras yo sufría sabiendo que mi madre apareció mi mejor amigo consiguió novio. Sí, así como lo escuchan (leen) Esteban consiguió novio. Es guapo y alto. A diferencia de Esteban es muy varonil, jamás pensé que fuera gay. Pero me cae muy bien. Es mayor que Esteban, tiene veinte años. Pero me agrada ver a mi mejor amigo feliz. Aunque yo no lo esté claro está.

-Oye, Mario hará una fiesta en su casa. ¿Quieres ir?- preguntó Esteban.

-Cariño me encantaría. Pero me imagino que la fiesta que hará tu novio será de solo hombres gays.- reí.

-Que graciosita Irina. Habrán hombres y mujeres. Homosexuales y heterosexuales. Así que si quieres ir me avisas. Es ésta noche a las ocho- me dio un beso en la mejilla y se marchó.

Creo que me haría bien salir. Quiero divertirme, quiero volver a ser la misma Irina. La que va a fiestas hasta la madrugada, la que tiene sexo sin miedo a nada. Creo que invitaré a Tom ¿Qué creen? Tomé mi teléfono y marqué su número.

Llamada

-Hola hermosa.- contestó rápidamente.

-¡Hola Tom! Quiero preguntarte algo.

-Claro dime. ¿Pasa algo? ¿O quieres tener..- lo interrumpí.

-Querido deja de pensar en eso por unos minutos.- reí. -¿Quería ver si te gustaría ir conmigo a una fiesta? Necesito despejar la mente.-

-Pues claro tu me dices cuando y donde.

Le di todos los datos y el me dijo que iría por mi a mi casa para llegar juntos. ¡Damas y caballeros Irina Mackenzie vuelve!

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Después de sacar toda la ropa que tengo de mi armario, conseguí lo que quería. Me pondré una falda corta de color blanca, la camisa es de flores y la acompañaré con algunos accesorios. Me puse un labial de color rojo intenso, pero mi maquillaje era leve. Solo polvo y algo de sombra. Escuché que mi teléfono sonaba. Era Tom, ya estaba afuera esperando por mí. Bajé rápidamente y me monté en el auto.

-Estás hermosa Irina.- dijo Tom con una sonrisa. Yo solo sonreí y el aceleró el auto.

Ya estabamos llegando a la casa de Mario. Era como una cabaña, pero era bastante grande y bonita. La música estaba muy alta y ya estaba llegando la gente. Busqué por todos lados pero no encontré a Esteban. Así le envié un mensaje y luego invité a Tom a bailar.

-He estado tan exhausta últimamente. Quiero olvidarme de todos a mi alrededor.- le dije a Tom mientras bailabamos.

-Yo tengo la cura perfecta para tus males.- sonrió y me mostró unas pastillas.

-¿Qué es eso?- pregunté.

-Son unas amigas que te harán olvidar todo. ¿Las quieres probar?

-¿Eso es droga Tom?-

-Sí lo es, pero solo dura unos minutos. Luego te sientes como nueva. ¿Quieres o no?.- volvió a mostrarme las pastillas.

Estoy confundida. No sé si tomarlas o solo ignorar a Tom.

-¡Irina viniste!- escuché una voz detrás de mí. Era Esteban.

-Sí amigo. Te estaba buscando pero no te encontré por ningun lado por eso te escribí.- mi amigo se puso rojo como un tomate. Ya me imagino lo que estaba haciendo. Me acerqué y lo abracé.

-Hola Irina.- dijo Mario. Le sonreí y le di un abrazo.

-Mario el es mi amigo Tom. Tom el es el novio de Esteban.- dije y se saludaron con la mano.

-Vengan les presentaré a unos amigos.- dijo Mario.

Fuimos detrás de él. Mario se acercaba a la barra. Allí había un grupito de personas.

-Miren les presentaré a mis amigos. Ella es María, ella Juana. Él es Bob...- siguió diciendo muchos nombres pero no le presté atención porque alguien más la tomó. Fabián se acercaba hacia nosotros con.. ¡No lo puedo creer! Con la estúpida de Raquel. ¿Qué rayos hacían aquí?

-Hola Mario, amigo.- dijo Fabián abrazando a Mario. Al parecer no se había dado cuenta de mi presencia. ¿Amigo? Este mundo es tan malditamente pequeño. -Ella es mi amiga Raquel.- cuando dijo eso giró su cabeza y me vio. Su cara era de confusión. Miró a Tom que sujetaba mi mano y puso una cara de enojo al igual que Tom.

Raquel se dio cuenta de mi presencia y me fulminó con la mirada.

-¿Qué haces tú aquí?- preguntó el mesero.

-¿Disculpa?¿Qué haces tú aquí?- dije.

-¿Ustedes se conocen?- preguntó Mario algo confundido.

-Sí amor.- contestó Esteban. -Nos conocemos de la escuela. -¿Verdad Fabián?- preguntó. El mesero solo asintió y luego sonrió.

Tom tomó mi mano y me llevó de nuevo a la pista de baile. Luego sentí una mano en mi hombro.

-¿Te gusta fastidiarme la vida cierto?- dijo Raquel.

-¿Disculpa?- no entendía porque me estaba diciendo eso.

-No te hagas la tonta Irina, siempre te metes donde estoy. Pareces una maldita mosca.- rueda los ojos.

¿Qué me dijo ésta estúpida?

-Mira Raquel no te permito que me hables así. Aquí la que está demás eres tú.- la señalé. -Yo soy la mejor amiga del novio del que hizo esta fiesta. Tú solo viniste de invitada, eres aquí una persona opcional ¿Entiendes?- Raquel se quedó pasmada. Juro que sino se quita en cinco segundos la mato.

-Raquel, ven bailemos.- dijo el meserito acercándose hacia nosotras. Maldito imbécil.

Raquel me dio una sonrisa de burla. Esa maldita ¿Quién se cree?

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Sé que es corto :(

Pero gracias por todos sus votos l@s amo!!

Voten y comenten.
En multimedia la ropa que está usando Irina.

Besos

También existen chicas malas |EDITANDO|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora