2- Con Las Emociones A Un Lado

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Trafalgar Law se aclaró la garganta, dejando salir un largo suspiro, para dejar sus sentimientos a un lado, pués principalmente debía preocuparse por la salúd de su paciente, en lugar de preocuparse por sus emociones.

Nami, por su parte, se encontraba confundida y pensativa. Trataba de analizar y procesar todas aquellas palabras. Pero, a pesar de todo, estaba preocupada por su amiga.

--T-Trafalgar... ¿Por qué ella perdió la memoria?-- Se atrevió a preguntar, pués no sabía mucho de medicina, y aún asi debía estar atenta a la salúd de (T/N).

--Debido al accidente, (T/N)-ya tuvo una lesión cerebral levemente grave, por lo cuál, tuvo una conmoción cerebral.-- Articuló el pelinegro, sintiendo un nudo en su gargante ante cada palabra que pronunciaba. Podría sentir su corazón rompiéndose en pedazos, poco a poco.

--¿Una conmoción... cerebral?

--Si, son causados por un fuerte golpe en la cabeza.-- Añadió el varón, bajando su mirada al piso.

La pelinaranja dejó salir un largo suspiro, sentía cómo las lágrimas amenazaban con salir, pero aún asi, trataba de mantener la compostura.

--Entonces... (T/N) perdió un año de memoria.-- Concluyó la fémina, con los labios  temblorosos. --Y en ese año de memoria, estaban tus recuerdos con ella, y p-por ello... Te olvidó.

--Si, asi es.-- Aclaró Trafalgar, con seriedad.

--¡¡¡TRAFALGAR!!!

--¡Capitán, ayuda! ¡¡No pudimos detenerle!!-- Exclamó Shachi, paranoico, corriendo por los pasillos, junto a su compañero, Penguin.

Ambos, sin aliento, se quedaron a espaldas del pelinegro, protegiendose de aquel pelirrojo que caminaba con el ceño fruncido hacía Nami, Law, Penguin y Shachi.

--¿¡Qué les pasa!? ¡¡Ésto no es un circo, par de idiotas!!-- Les regañó el varón, enfadado, mientras que otro hombre se acercaba a paso rápido.

--¡¡¡Trafalgar, ésto es tu culpa!!! ¡¡¡Te voy a matar!!!

Un chico alto, de tez pálida, cabellos rojos y ojos de color ámbar, tomó al ojeroso del cuello de su bata, estampándolo contra la pared.

--¡Capitán!-- Exclamó Penguin, con los ojos abiertos.

--Eustass-ya...

--¡Maldito, ¿qué le hiciste!? ¡¡Por tú maldita culpa ella está asi!! Sabía que no debía confiar en ti.-- Gruñó el pelirrojo, apretándo sus dientes. --¡Te voy a matar, imbécil!

--¡Kid, Eustass! Mierda, ¡cálmate!-- Pidió Nami, tratándo de separar a ambos varones. --¡Tranquilo, (T/N) se encuentra bien! ¡Ella...!

--¡Cállate! ¡¡Me las vas a pagar, Trafalgar!!-- Lo único que Trafalgar Law podía hacer, era tratar  de  calmar el agarre del pelirrojo, para no morir, claro. --¡¡Fué tu culpa, ¿verdad!!?

--Eustass... por favor, cálmate.-- Le suplicó la de cabellos naranjos, aún tratando de tranquilizar el ambiente.

--¡¡El capitán va a morir, Penguin, haz algo!!

--¿¡Qué!? ¡¡No quiero morir tampoco!! ¡Sálvalo tú!

--E-Ella... me o-olvidó...-- Susurró el médico, tensándo la mandíbula, mientras que notaba cómo Eustass Kid relajaba el agarre. --¿F-Feliz...? M-Me ha olvidado...

--¿Perdió la memoria?-- Kid soltó al pelinegro, estupefacto. --¿Me...?

--Hablemos en un lugar más relajado.-- Ordenó el mayor, caminando hacía su oficina.

En Busca de Cenizas (Law x Lectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora