En Busca de Cenizas (Law x Lectora)

4- Un Vacío

--No es nada grave, pero deberías de dejar de forzarte a recordar algo.

(T/N) bajó la mirada ante los regaños del pelinegro.

--Lo siento, Trafalgar-kun.

Esa diminuta inquietud volvió a aparecer en el pecho del médico, pero este trato de ignorarlo.

--Creo que lo mejor seria si vienes al hospital mínimo una vez a la semana.-- Recomendó Law, mientras se cruzaba de brazos. --Puedo vigilar mejor tu recuperación.

--Me parece bien.-- La peli-(c/c) le sonrió, provocando una leve emoción en el corazón del ojeroso. --Entonces, ¿nos vemos la próxima semana?

Law asintió, la joven le sonrió y abandonó la oficina.

--Mierda, mierda, mierda...-- El varón dejó caer su cabeza en su escritorio, usando sus brazos como almohada. Parecía un adolescente cansado del colegio.

<<Su maldita sonrisa... Ahora tengo que verla mínimo una vez a la semana, ¿como se supone que voy a olvidarla?>>

El cansancio se apoderaba del cuerpo del ojeroso, quién no había dormido hace semanas.

--Te extraño...

(...)

--¿Qué hay de cena?-- Preguntó la chica.

--Hice unas empanadas, o esa era la intención.

--Parece que el Chef Kid quiso sacar las garras.-- Le bufó la oji-(c/o). --No están tan mal.

--Cierra la boca.-- Gruñó el pelirrojo, frunciendo el ceño. --Por cierto, hoy vendrá Killer y se quedara a dormir.

--¿Quieres una medalla o qué?-- Kid golpeó ligeramente el hombro de su hermana. --Iré a dormir.

--¿A estas horas?

--Me siento cansada.-- Confesó la joven, quién sentía que no había pegado el ojo desde hace meses. A pesar de que dormía tranquila en su habitación, sentia una extraña sensación de nostalgia entre las sábanas, como si faltará algo al dormir. --Buenas noches.

Fue a su habitación, donde se recostó en la cama y cerró sus ojos. Se llevó una de sus manos en el pecho, sintiendo las palpitaciones de su corazón. Inconscientemente frunció el ceño y suspiró varias veces.

Extrañaba algo, ¿pero el qué?

¿Qué le faltaba?

"Vete a dormir."

Escuchó una voz a los lejos, una voz ronca, un tono molesto pero de alguna manera lo encontraba dulce. Sentía que reconocía aquella voz.

"¿Quieres que duerma contigo?"

La fémina sintió un leve peso en su pecho, una extraña intranquilidad.

Una vibración de su celular fue lo que le sacó de su trance. Era un mensaje.

"Sanji-chan: (T/N)~SWAANNNNNN NAMI-SWAN ME CONTÓ QUE HOY TUVISTE UNOS DOLORES DE CABEZA, ¡¿NECESITAS QUE TE DE UNOS MASAJES CON MIS SUAVES MANOS?!"

(T/N) sonrió al leer ese mensaje. Un leve sonrojo pintó sus mejillas. Sanji era un chico que conocía desde hace unos años.

Se había enamorado de él por su atractiva caballerosidad.