Semidiosa y Bruja (PJO y HP) 1 LIBRO

El duelo no tan duelo

La mañana siguiente Alex estuvo con sus amigos todo el día paseando, ya que era sábado y a la noche tenían la pijamada. La pelinegra también trataba de averiguar qué era el paquete que sacó Hagrid de Gringotts, pero era como del tamaño de una roca promedio, y habían muchas opciones. 

Alex estaba enfrente del lago con su guitarra cantando "Wish you were here" de Pink Floyd en la tarde. Sus amigos estaban almorzando, pero ella no tenía hambre. Al terminar, un chico de como unos 13 se le acercó. El chico tenía el cabello castaño, ojos grises.

- Hola, ¿pasa algo? - Preguntó Alex.

- No, solo vengo porque terminé la tarea y estoy aburrido. Te vi tocando, eres muy buena.

- Gracias. ¿Tu tocas algún instrumento?

- No... Mi familia es de magos y los instrumentos mayormente se tocan solos. Aunque hace unos año intenté tocar la guitarra, soy realmente un asco. 

Alex rió - Podría enseñarte, es fácil. 

- ¿Enserio? 

- Si... Tengo tiempo libre cuando mis amigos están ocupados - Respondió mientras se levantaba del gras - Soy Alexandra, por cierto. 

- Y yo Cedric, Cedric Diggory. ¿Nos vemos el miércoles aquí?

- Bien. El miércoles después de clase. Oye tengo hambre, ¿sabes dónde están las cocinas?

- Todo Hufflepuff sabe donde están. Vamos - Dijo empezando a caminar hacia el castillo. 

Cedric resultó ser un buen chico. Le recordaba a Luke, aunque Luke era mayor cuando se conocieron. Pasaron un rato comiendo y hablando. Alex se enteró que el chico era fanático del Quidditch, y que era popular en su casa. 

Al caer la noche, Alex se puso su pijama, unas sandalias, agarró su mp 3 para mostrarles buena música a los chicos, agarró mascarillas que no usaba pero que llevaba con ella por Afrodita; también fue a la cocina a buscar comida, sobre todo dulces. La pijamada iba a ser genial.

Al llegar al cuarto de Blaisito tocó la puerta tres veces. La puerta se abrió dejando ver a dos chicos: Theodore y Zabini. 

- Llegó el alma de la fiesta - Dijo como saludo sentándose en la cama de su amigo moreno. 

- ¿Saben que si nos encuentran estaremos castigados por el resto de nuestras vidas? - Preguntó Theodore preocupado.

- No va a pasar, amigo - Dijo Blaise despreocupado. 

- Además si nos castigan, estaremos juntos en el castigo, no sería tan malo - Nott asintió, pero su aura aún era dudosa -. Bien, haré unos encantamientos para el sonido, para no despertar a nadie por si acaso.