Semidiosa y Bruja (PJO y HP) 1 LIBRO

Mal tercio

- Así que Ares y Afrodita - dijo Percy intentando concentrarse en una conversación y no el alrededor - tienen un asuntillo.

- Ese es chisme viejísimo, Percy - dijo Alex fascinada con el lugar -. Tiene tres mil años. 

- ¿Y el marido de Afrodita?

- Bueno, ya sabes... - empezó Annabeth -. Hefesto, el herrero, se quedó tullido cuando era pequeño, Zeus lo tiró monte Olimpo abajo...

- De hecho fue Hera - comentó Alex recordando las pocas charlas que había tenido con Hefesto. Solo cuando él iba a hacer algún encargo o algo por el estilo. El caso era que el dios le había revelado lo que en realidad pasó. 

- Pero... Bueno, el caso es que no fue muy guapo. Habilidoso con las manos, sí, pero a Afrodita no le van los listos con talento, ¿comprendes?

- Le gustan los motoristas - dijo Percy. 

- Lo que sea - zanjó Annabeth.

- ¿Hefesto lo sabe?

- Oh claro - repuso Alex antes de que esos dos empezaran a pelear de nuevo -. Una vez los pilló juntos, quiero decir in fraganti. Entonces los atrapó en una red de oro e invitó a todos los dioses a reírse de ellos. Hefesto siempre está intentando ridiculizarlos. Por eso se ven en lugares remotos como... - Alex se dio cuenta que enfrente ya tenían el famoso túnel -. Como ése. 

Enfrente tenían una piscina con forma de cuenco, de unos cuarenta y cinco metros de ancho, sería excelente para patinar. En el borde, esparcidos por el margen, habían estatuas de Cupido montando guardia con las alas desplegadas y los arcos listos para disparar. Al otro lado se habría un túnel, por el que probablemente corría agua cuando la piscina estaba en funcionamiento. Tenía un letrero que mostraba: "EMOCIONANTE ATRACCIÓN DEL AMOR ¡ÉSTE NO ES EL TÚNEL DEL AMOR DE TUS PADRES" Grover lo leyó en voz alta para todos y se acercó al borde. 

- Chicos, miren. 

En el fondo de la piscina había un bote de dos plazas blanco y rosa, lleno de corazones. En el asiento izquierdo se lucía una circunferencia curva de bronce bruñido, el escudo de Ares. No podía ser esa la misión, después de todo, Ares les había pedido ayuda y Alex esperaba que fuera peligrosísimo. Pero en vez de eso, se veía bastante sencillo. 

- Esto es demasiado fácil - observó Percy -. ¿Así que bajamos y lo tomamos y ya está?

Annabeth pasó sus dedos por la base de la estatua de Cupido que se hallaba a su lado, y le dio un codazo a Alex para que le prestara atención. Posado al pie de la estatua, se observaba una letra Griega. La letra Eta. 

- Aquí hay una letra griega grabada - anunció Annabeth a los chicos -. Era. Me pregunto... 

- Podría ser una t... - Alex fue interrumpida.