¿Qué estamos haciendo?

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Sus expectativas fueron altas desde el principio, en el exacto momento que imaginó ser partícipe de esa situación, todo, por el asombroso aspectos de Namjoon; pero, lo que ocurría en esa habitación volvía a sus expectativas nulas e insignificantes, porque no creyó jamás, que ese multimillonario empresario fuera tan bueno en un acto tan banal pero tan fuerte, como lo era el sexo.

Esa noche no hubo cena, no hubo largas explicación, mucho menos innecesarias palabras, y todo lo que imaginariamente planearon se desecho, porque al llegar, su primera reacción fue perderse en sus labios, y claramente Namjoon no le rechazó, después de todo, la cena siempre fue una forma sutil de pedirle esa esperada intimidad.

Ninguno iba a dudar de las acciones del otro, porque sin duda alguna lo deseaban, que el sexo los uniera era lo que más anhelaban del otro, saciar sus ganas incontrolables, pasear su cuerpo entero por las manos ajenas, lo querían todo, y mientras las embestidas a su débil cuerpo se tornaban crueles y rápidas, Taehyung solo reafirmó sus egoístas y arrogantes decisiones.
Pero, el no era un completo idiota, podía notarlo, eso no era simple sexo, hubiera deseado que asi fuera para que su culpa no fuera mayor luego, pero esas dulce caricias suaves que se extendian por todo su cuerpo, esos besos apasionados pero al mismo tiempo excesivamente cariñosos, los susurros ligeros de su nombre cuando tímido le hizo una felación arrodillado, logrando ver su exitoso rostro bañado en placer y sintiendo su mano sostener su rostro, tan sutil y hermoso, que parecía una caricia al objeto más débil y precioso, eran claramente algo más. Se notaba tanto que el principal objetivo de Namjoon era cuidarlo y complacerlo.

Cuando su pierna temblorosa entre las ajenas manos fue puesta en el hombro fuerte de ese hombre adinerado, pudo sentir el epítome del placer de todo el fogoso sexo que Namjoon le ofrecía, casi perdía las ideas, podía jurar haber visto las estrellas, sus ideales y convicciones cambiaban, su egoísmo e irresponsabilidad solo se marcaban, y toda duda se desvanecía. No estaba dispuesto a dejar ese placer a pesar de lo miserable que lo haría.

—Y creí que eras sexy solo modelando... Tu rostro es aún más excitante cuando te follan... Tan lindo— era abrazador, arrasante, podía jurar que a penas logró oír esas palabras porque estaba cegado en ese placer desproporcionado —Taehyung...

No respondió a sus palabras, ignoró su mano certera acariciando su pierna, y solo se centró en el próximo orgasmo que estaba llegando brutal a su cuerpo, sintió como sus piernas fallaban y el gemido tan profundo que escapó de sus labios, solo enloqueció al hombre masculino que se regocijaba al oírlo. Finalmente ambos acabaron, se oyeron solo sus respiraciones agitadas, y Taehyung supo que se aproximaba la peor parte de tanto buen sexo.

Unas grandes manos se aferraron a su cintura, y un pecho acelerado se pegó a su espalda. Sabía que él sonreía, pudo oír ligero su regocijo, porque sus labios se encontraban cerca de su oido, y notó el descarado atrevimiento ajeno, cuando esos labios gruesos besaron su cuello, provocando un temblor en todo su cuerpo.

—Cariño... ¿otra vez? Aunque eres increíble en esto y al parecer, hasta insaciable, mi cuerpo necesita un descanso, asi que, ya debo volver a mi hogar, no le dije a Yoongi que me iba, no quisiera preocuparlo...— sus escusas eran normales, pero últimamente poco funcionales, sus ocasionales amantes, al igual que Namjoon, terminaban por interrumpirlo con la firme desición de cambiar esa idea.

—¿Te irás? Duerme aquí Taehyung, solo por hoy... Fue un largo día, es tarde, y puedes enviarle un mensaje a Min para que se aseguré de que estás bien— Lo intentó, salir del lugar para volver a su cómodo hogar y lamentarse con tranquilidad por su falta de empatía, pero no pudo hacerlo, no supo si fue por el fuerte agarre a su fina cintura o por la creciente culpa de disfrutar de su cuerpo y luego dejarlo sin compasión alguna.

—Vaya, ¿Kim Namjoon rogando para que me quede en su cama? Jamás lo hubiera esperado— Oyó su cautivadora risa y solo suspiró mucho más tranquilo. Namjoon afortunadamente se veía feliz —Bien, me quedaré.

Sintió los inevitables besos de ese hombre en sus desnudos hombros y nuevamente en su sensible cuello, quería rechazar esa muestra vaga de cariño, pero se sentían tan íntimos y diferentes, el quería muchos más besos y al mismo tiempo, quería dormir para no sentir el estima claro que Namjoon comenzaba a expresar por el.

No hubo palabra alguna, intentaba dormir y esperaba que Namjoon imitara sus acciones, pero lo único que oyó fue su murmurado nombre minutos después de acabar su corta conversación, como si se estuviera asegurando de que estaba totalmente dormido. Taehyung solo fingió estarlo, y espero lo mejor de esa situación.

Namjoon, confirmando que el lindo artista estaba descansando profundamente, se sentó sobre su cama, apoyando sus cruzados brazos sobre sus rodillas, y sobre estos, su cabeza, observando atentó la espalda desnuda que se encontraba en su cama, y los desordenados cabellos azules de ese confuso hombre.

No podía siquiera asimilar lo que iba a ocurrir luego de aquello, las ideas no fluían, y sus sentimientos era confunsos y al mismo tiempo tan claros. Había muchos aspectos que aún no conocía y entendía sobre Taehyung; se preguntó decenas de veces que era esa relación, qué sentía ese artista, por el. ¿Lo amaba? ¿era un capricho? ¿el era su nuevo Jimin? ¿qué ocurría en la mente de ese hombre?

—Y creia que te entendía. Taehyung eres más complejo de lo que esperaba. ¿Estás realmente enamorado de mi?— El se estremeció al oír esa pregunta, hasta quiso responder, de sus labios iba a escapar la respuesta como un halo repentino de sinceridad, pero no pudo hacerlo al oir un suspiro tan pesado como la culpa que comenzaba a sentir —Porque pienso que me gustas... Tal vez es por tu atractivo o por tu personalidad, no lo sé... Qué tan malo fue probar tu piel ahora ¿eh? Kim Taehyung— sintió su mano acariciar sus azules cabellos, y seguido un beso atento y certero en el mismo lugar.

Definitivamente el post sexo era la peor situación que le podía pasar, el odiaba ese momento, odiaba sentirse querido por alguien que no quería, odiaba hasta oír el palpitar acelerado de ese hombre, odiaba haber escuchado su confesión, y sobre todo, odiaba toda su persona, todo el daño que ocasionaba de forma consciente y clara. Se odiaba como a nadie.

Kim Taehyung, un amable y carismático artista, con un talento increíble, dotado de habilidades entrenadas y ágiles, siempre fue un amante egoísta, aceptaba su culpa mas nunca cambiaba. El nunca amaba, nunca se aferraba.

💐


Okey, solo decirles que se vienen muchas cosas, tengo muchas ideas, incluyendo un especial de San Valentín, pero no prometo nada.

En fin, ¿No están triste? La curiosidad de Namjoon lo llevó a todo esto. Solo recuerden que Taehyung es lo peor que le paso a nuestro bebé Nam.

Eso es todo, gracias por leer.❤

La inspiración de un artista - Yoonjin/NamtaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora