La inspiración de un artista - Yoonjin/Namtae

El hombre más desafortunado del mundo

Park Jimin no era exactamente lo que podría llamarse, una persona afortunada; luego de su graduación, conseguir trabajo que no fuera con nepotismo de fondo, le resulto difícil con únicamente un título de periodismo en manos; su economía tampoco era la mejor, a penas lograba llegar a final de mes con su bajo y ajustado sueldo; y en cuanto a su vida amorosa, fue dejado y rechazado tantas veces, que cada día perdía más el optimismo en ese aspecto. Pero esa situación, era pura y cristalina suerte, conseguir una entrevista personal con el nuevo CEO de K.B. aún después del escandalo que su amigo logró, era una oportunidad única en la vida.

Admitía que al principio creyó que su solicitud sería indudablemente rechazada, pero la respuesta afirmativa llegó más rápido de lo esperado, y sabiendo que eso le daría puntos extras con su jefa, la situación solo lo emocionaba más; si todo salía bien, tal vez, y solo tal vez, podrían ascenderlo a un firme puesto en el estudio de la televisora; no volvería a correr detras de empresarios, ejecutivos, políticos, jueces, abogados o civiles para hacer preguntas, no sería escupido por personas que no saben hablar, y tampoco lo volverían a insultar por hacer su trabajo. Todo sería mucho mejor si lograba que ese momento siguiera bien, y haría todo para que asi sea, muy a pesar de la mirada asesina que Kim Namjoon sostuvo en todo momento hacia él y lo intimidado que por consiguiente se sentía.

—... Y por último, permítame agradecerle por aceptar está entrevista, tenemos entendido que es la primera personal desde que asumió el puesto de CEO. Ha sido un placer.

—Ha sido muy amena, y muchas gracias a ustedes por interesarse en K.B., espero nos reencontremos muy prontamente— Namjoon ofreció una calida y agradable sonrisa hacia la cámara, y Jimin solo hizo un pequeña seña a su camarógrafo para dar por terminada la grabación.

—Ah dejeme agradecerle nueva y personalmente señor Kim, está entrevista me ayudara mucho— El rió con su modesta broma, pero el rostro neutro y hasta molesto del CEO no cambio, logrando ponerlo aún más nervioso.

—No hay nada que agradecer, Park ¿Jimin?— a la pronunció en pregunta de su nombre, el solo asintió afirmando atentó a sus siguientes palabras —De hecho, me gustaría pedirle privacidad para hablar de cierto tema, solo entre nosotros, si no le molesta.

No podía negar que le sorprendió, pero al mismo tiempo era esperable, estaba seguro de que las preguntas iban a ser sobre su desvergonzado amigo y el gran escandalo que realizó. Namjoon era un hombre serio y muy formal, pero, al final del día, era humano ser curioso, y luego de una situación así, era comprensible.
Hizo cortas señas al camarógrafo que lo acompañaba, pidiendo que le esperara en la recepción hasta que terminaran con esa conversación.

—Estoy a su disposición señor Kim.

—Lo agradezco. He de suponer que ya sabe por qué solicité hablar con usted, mas que recriminarle o algo similar quisiera saber si su amigo tuvo algún problema con la prensa. En su momento su... Propuesta, fue polémica— Sintió la voz del CEO sumamente tranquila, acción que calmó sus pesados nervios; realmente solo parecia preocupado por Taehyung, por amabilidad.

—Por suerte, Taehyung ha sido entrevistado solo por algunos periodistas y ha dado respuestas poco escandalosas en aquel momento. Lamento realmente lo que ocurrió ese día y gracias por su preocupación— Jimin se encontraban apenado, recordaba como arrastró a su amigo luego del espectáculo que hizo, metiéndose entre todas las personas, sosteniendo su brazo con fuerza y disculpándose directamente con el CEO, finalizando por llevarlo al automóvil de la televisora para retirarse de ese lugar —Taetae fue realmente un idiota.

—¿Taetae?— su rostro denotó sorpresa al momento, y Jimin juro hasta escuchar un chasquido molesto de su parte, que le intimidó.

—Me disculpo, es como suelo llamarlo, su nombre realmente es Kim Taehyung...